En su evento de Surface de hoy, Microsoft anunció dos chips personalizados. El primero de ellos es para el portátil Surface Laptop 3, y está basado en el Ryzen 3700U de AMD. El segundo, que impulsa el Surface Pro X, se denomina ‘SQ1’ y se basa en la solución Snapdragon 8cx (Compute eXtreme) SoC de Qualcomm lanzada el año pasado.
El procesador SQ1 de Surface Pro X tiene una potencia de 2.1 teraflops
Snapdragon 8cx fue el primer chip de Qualcomm diseñado específicamente para equipos con Windows Always Connected. Este SoC cuenta con ocho núcleos Kryo 495, divididos en dos grupos de cuatro núcleos cada uno para un alto rendimiento y eficiencia energética. La frecuencia de los núcleos no se conoce, pero el Galaxy Book S de Samsung, alimentado por el 8cx, tiene una frecuencia base de 2,84 GHz.
El procesador ARM SQ1 personalizado fue creado en conjunta colaboración entre Microsoft y Qualcomm específicamente para el sistema operativo Windows 10 y esta basado, en gran medida, en el 8cx.
Según los detalles, la CPU Kryo SQ1 funciona a unos 3GHz. El SQ1 también tiene ocho núcleos y, al igual que el 8cx, se fabrica con un nodo de 7nm. En el camino hacia la GPU, Microsoft parece haber trabajado mucho con Qualcomm también en este aspecto. La GPU del SQ1 tiene una potencia de 2.1 teraflops, lo que es bastante impresionante. Sin embargo, al igual que el portátil Surface Laptop 3, este también se utilizará para la creación de contenido en lugar de para los juegos. Por otro lado, la GPU Adreno de Snapdragon 8cx tiene una salida de 1,8 teraflops, por lo que es de esperar que el SQ1 consuma un poco de más energía que el chip de Qualcomm.
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El SoC también soporta memoria LPDDR4X de ocho canales, por lo que esta especificación también lo hará en el SQ1. La plataforma de Microsoft tiene una base de 7W TDP que puede ser escalada hasta 15 W dependiendo de la necesidad. Surface Pro X de Microsoft busca dar nueva vida a la plataforma ‘Windows-on-ARM’.
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