Debido a los factores políticos y económicos a nivel mundial que están azotándonos una vez más, la demanda de consumo en productos electrónicos experimentó un fuerte descenso en 2022, y no se esperan mejoras para este 2023, todo lo contrario. De hecho, un análisis de TrendForce ha detectado que los envíos globales de portátiles de los ODM podrían caer este año con respecto al anterior…
El mercado de portátiles en situación delicada
Según un análisis de TrendForce, el mercado de envíos globales de portátiles desde los ODMs alcanzó unas 186 millones de unidades en 2022. Eso muestra una caída interanual del 24.5% con respecto a 2021. Sin embargo, en este 2023, lejos de mejorar, parece que esa caía seguirá aumentando.
TrendForce ya anuncia que es probable que la caída de este año sea más moderada, pero que llegaría al 7,8% interanual comparada con el 2022. Es decir, se preveen unos envíos que llegarían a las 171 millones de unidades. Una cifra incierta debido a que el mercado ya está tocado desde el pasado año.
Debido a que la demanda del mercado de portátiles fue muy baja durante 4T22, estas cifras no generan una gran esperanza para los vendedores de estos equipos. Es probable que la demanda de finales de año se deba a que muchos usuarios estaban esperando a las novedades lanzadas en el CES 2023, pero también hay que ser realistas y ver que la crisis económica y la inflación no están ayudando en absoluto.
Según TrendForce, se espera que para que los ODMs puedan deshacerse de las existencias actuales que tienen en la reserva se necesitaría llegar al menos al 2T23, es decir, el segundo trimestre de 2023, lo que es bastante llamativo.
Año Nuevo Lunar chino de por medio…
Además de todo esto, el Año Nuevo Lunar de 2023 llegará antes en comparación con los dos años anteriores. Por eso, las marcas de portátiles han anticipado que con los brotes de COVID-19 en China todo esto se podría convertir en una gran variable en el mercado, ya que después de las fiestas podrían dispararse los contagios.
Recuerda que la mayoría de fabricantes ODM están en China.
La escasez de componentes y la pandemia podrían afectar de forma aún más negativa a la situación de los envíos de los portátiles. Por todo ello, TrendForce prevee que los envíos caigan un 9.5% intertrimestral, con unas 35.1 millones de unidades para 1T23. Eso sería el mínimo en 10 años de resultados en este primer trimestre.
Movimientos en las cadenas de suministros
Las cadenas de suministro también están cambiando. Los ODM se están reubicando. Los dos países impulsores de marcas de portátiles, Estados Unidos y China, están moviendo algunas fábricas a otros puntos estratégicos fuera de China, todo en torno a la geopolítica actual.
Por ejemplo, Vietnam podría ser uno de los países con más ventajas tanto geográficas como demográficas para la búsqueda de nuevos materiales y componentes para China y desde donde se podría transportar rápidamente desde sus fábricas. Además, el país vietnamita tiene una mano de obra barata.
A esto hay que agregar las restricciones que está poniendo Estados Unidos a China, por lo que fabricar desde otro lugar fuera del gigante asiático podría evitar estas restricciones a las empresas americanas que delegan el trabajo en estas ODMs. Por esto no es de extrañar que grandes ODMs como Compal, Wistron y Foxconn hayan comenzado a construir líneas de ensamblaje de portátiles en Vietnam, cuando antes estaban todas aglomeradas en China.
Según TrendForce, Vietnam representará un 10% de la producción de portátiles en 2023 debido a estos movimientos.
Para finalizar, también decir que el modelo de mercado de portátiles también está moviendo las líneas de ensamblaje más cerca del mercado de consumo para reducir gastos logísticos. Por ejemplo, las marcas con sede en Estados Unidos y que venden en este mercado han pensado en líneas de ensamblaje en México para abastecer al mercado norteamericano.
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Algunas marcas también están buscando socios en la India para establecer allí cadenas de ensamblaje locales para abastecer a otros países cercanos. Y no solo eso, los fabricantes extranjeros que se instalen en este país tendrán un incentivo fiscal sustancial, lo que repercutirá en el precio y ganancias.
