Slimbook Executive 16 Review en Español (Análisis completo)

La marca española vuelve a ampliar su gama de portátiles con los Slimbook Executive 16 y 14, dos opciones pensadas para unificar portabilidad, rendimiento y un muy buen apartado de periféricos donde destaca especialmente el enorme touchpad con función de desactivación de dos áreas, y una pantalla 2K de 90 Hz.

En solo 18 mm de grosor con chasis de aluminio y magnesio tenemos un hardware potente como es el Intel Core i7-12700H junto a la GPU Nvidia RTX 3050 Ti. Como en otros modelos, Slimbook el fabricante permite configurar componentes como el SSD, RAM o sistema operativo, un detalle que raramente vemos y que valoramos muy positivamente. ¡Veamos qué tal va este equipo!

Agradecemos a Slimbook su confianza en nosotros al enviarnos este portátil para su análisis.

Slimbook Executive 16 características técnicas

Unboxing

El Slimbook Executive 16 nos llega en una discreta caja de cartón rígido con acabado neutro donde no vemos referencia al modelo en cuestión. En su interior, tenemos una segunda caja con el equipo directamente colocado sobre moldes de polietileno y envuelto en una bolsa textil.

El contenido de la caja será el siguiente:

• Portátil Slimbook Executive 16
• Adaptador de alimentación con enchufe europeo
• Documentación de usuario

Diseño exterior

El diseño y construcción de este Slimbook Executive 16 está al nivel de cualquier equipo Max-Q de gama alta que se precie, cuidando cada detalle de su chasis de aluminio y magnesio como esquinas, bordes o superficies. Con unas medidas ajustadas para el tamaño de su pantalla, y un grosor de 18 mm podemos categorizarlo como un ultrabook en toda regla. Su peso inferior a 1,5 kg asegura una buena portabilidad, amplificada para la versión de 14” si queremos algo aún más compacto.

El estilo minimalista se deja ver en la tapa de pantalla, construida en formato unibody con bordes robustos y aceptable rigidez en tan solo 4 mm de grosor. Tiene una superficie completamente lisa con el logotipo de la marca serigrafiado en la esquina de forma elegante, terminando en una textura ligeramente rugosa que mejora el agarre. Está disponible solo en gris plateado, utilizando el tono natural del aluminio.

Los bordes suavemente redondeados de las esquinas dan paso a unos filos perfectamente implementados mediante CNC y sin bisel. Un corte en la zona central permitirá abrir cómodamente la tapa, mientras que los cantos de la carcasa inferior inclinados hacia dentro mejorarán la sensación de delgadez del equipo, siempre una técnica habitual en portátiles.

En la zona trasera tenemos una bisagra central ocupando prácticamente toda la longitud de la pantalla, la cual hará que ésta se abra hacia atrás, pero sin llegar a tocar el suelo como hacen por ejemplo los Zenbook de Asus. Este sistema de apertura hace que el borde trasero se quede parcialmente tapado con la propia bisagra, por lo que parte del aire caliente expulsado por el disipador subirá hacia el panel. De hecho toda la zona trasera estará abierta para su refrigeración.

La parte inferior del equipo utiliza una tapa de aluminio con múltiples rejillas que permiten la correcta entrada de aire hacia los ventiladores, así como doble apertura para los altavoces en las esquinas frontales. El acceso al interior en principio es sencillo al ofrecer una buena capacidad de actualización.

A continuación abrimos el Slimbook Executive 16 para ver una clara inspiración al diseño de los MacBook Pro, no solo en las esquinas curvadas, sino en el teclado de color negro y enorme touchpad ocupando toda el área libre que deja el primer elemento. De hecho pocos portátiles ofrecerán tal facilidad de manejo para la pantalla, aprovechando el área para dotarlo de dos zonas individuales que permiten desactivar la mitad del touchpad o el trackpad por completo. El teclado cuenta con panel numérico, el cual podría haberse suprimido perfectamente y pocos lo echarán en falta.

En cuanto a la pantalla, ofrece unos marcos bastante ajustados y en color negro para mejorar la sensación de todo-pantalla del equipo. Sus grosores son de 5 mm para los bordes laterales, 8 mm para el superior donde se ubican las cámaras y micrófonos, y 12 mm para el marco inferior. Su acabado Anti-Glare elimina bien los reflejos de la pantalla para darnos una imagen clara en interior y exterior.

Conectividad

Slimbook Executive 16 aprovecha las prestaciones del hardware Intel para darnos una buena y variada conectividad, aunque se queda al nivel de una gama media premium.

En la parte derecha tenemos:

• 1x USB4-C Thunderbolt 4 con Power Delivery
• 1x USB 3.2 Gen1 Type-A
• HDMI 2.0b
• Jack DC-In

Mientras que en la zona izquierda quedan:

• Jack de 3,5 mm combo para salida de audio y entrada de micrófono
• Lector de tarjetas SD
• 1x USB 3.2 Gen1 Type-A
• 1x USB 3.2 Gen2 Type-C con DisplayPort 1.4
• Ranura Kensington para candados

La interfaz Thunderbolt nos permitirá conectar dispositivos de gran ancho de banda como SSD portátiles, capturadoras o hubs que amplíen la capacidad pudiendo ser un perfecto equipo para creadores de contenido. Además tenemos la capacidad de carga habitual en los Thunderbolt, y en un segundo USB-C conexión de vídeo en 4K para monitores externos.

Una tarjeta Intel Wi-Fi 6 AX201 será la encargada de proporcionarnos la conexión de red principal, aunque Thunderbolt también admite LAN Gigabit. Esta tiene capacidad de doble banda a 574 Mbps en 2,4 GHz y 2,4 Gbps en 5 GHz, así como Bluetooth 5.2. Lo ideal a estas alturas sería equipar Wi-Fi 6E, aunque podríamos actualizarla nosotros mismos al utilizar una ranura CNVi.

Pantalla de 16” para tareas fluidas

La pantalla del Slimbook Executive 16 es un elemento donde se han destinado grandes esfuerzos por elegir el panel más equilibrado posible para usuarios de todo tipo. Y la primera clave ha sido darle una diagonal de 16 pulgadas que asegure un amplio espacio de trabajo para diseño, CAD, modelado 3D o simplemente multitarea. El formato 16:10 o de proporción áurea está de moda para este tipo de equipos, aunque no es la perfecta opción para gaming puro.

Así que tenemos un panel LCD IPS con resolución 2K de 2560x1600p, dándonos una excelente densidad de píxeles para generar una imagen nítida. De él solamente se especifica su frecuencia de refresco de 90 Hz, a medio camino entre un equipo de propósito general y gaming, que sin duda notaremos en la experiencia de uso. De hecho debería ser el estándar actualmente y abandonar ya los 60 Hz.

El panel en concreto será un BOE modelo NE160QDM-N64, el cual ofrece un contraste típico de 1500:1 y brillo típico de 400 nits. Anticipamos una buena calibración al tener un blanco neutro y colores naturales, pero no especifica certificación de ninguna entidad de calibración reconocida. Sí que nos parece muy interesante la posibilidad de modificar el perfil de color desde el software de control general de Slimbook, permitiendo realzar tonos, modificar la temperatura de color y otros aspectos del panel.

Los ángulos de visión de 178^o vemos que se cumplen de forma correcta, solo con una leve pérdida de contraste en las posicione horizontales. Por otro lado no apreciamos fugas de luz en bordes o esquinas de pantalla, y la prueba de ghosting en caso de usarlo en gaming ha resultado suficientemente satisfactoria. No alcanza el nivel de nitidez en imágenes en movimiento de un panel OLED, pero sí es bueno para tratarse de un IPS no muy rápido.

Calibración del panel

Hemos efectuado las pruebas de calibración para el panel del Slimbook Executive 16 con el colorímetro X-Rite Colormunki Display, y los programas gratuitos DisplayCAL 3 y HCFR.

Brillo y contraste

Las especificaciones del panel se quedan prácticamente en las medidas prometidas por el fabricante del panel en contraste, aunque el brillo se quedará ligeramente por debajo. La temperatura de color está muy bien calibrada, mientras que la profundidad de negros es muy buena tratándose de un panel IPS.

Espacios sRGB y DCI-P3

En sRGB obtenemos un Delta E medio de 1,77, mejor incluso de lo que esperábamos para el panel, pues entra dentro de lo considerado ideal en fidelidad de color. La cobertura de color sí que se queda algo más justa con un 97% para un espacio que debería estar cubierto al completo.

Para DCI-P3 hemos obtenido una cobertura de color del 74% cifra discreta para ser un modelo 2K, y los paneles de 165 Hz de equipos gaming superan en este apartado el panel del Slimbook. Finalmente la calibración en este espacio empeora un poco respecto a sRGB, aunque se mantiene en un Delta E de 2,49, una más que aceptable medida que podrá mejorarse con el perfilado manual desde las opciones de software y la ayuda de un colorímetro.

Sistema de sonido y webcam

La configuración de sonido del Slimbook Executive 16 consiste en 2 altavoces ubicados en las esquinas inferiores que implementan tecnología Nahimic de SteelSeries, por lo que podremos ajustar el ecualizador y otros parámetros desde Nahimic 3 en Windows.

De desempeño del sistema podemos considerarlo a un nivel estándar, pues estos altavoces no tienen un volumen muy potente ni destacable presencia de graves. Significa por tanto que las frecuencias medias y agudas predominan, al menos con un equilibrio bastante bueno y sin distorsionar a su máxima capacidad. En conclusión, tendremos una experiencia correcta, pero nada destacable en contenido multimedia o juegos, así que unos auriculares será lo conveniente en la mayoría de casos.

En cuanto a la webcam, se ha equipado un sensor de 1080p que graba a 30 FPS, así como una matriz de dos micrófonos capaces de grabar en rango lejano y con patrón omnidireccional. No hay sistema de cancelación de ruido ni filtros de imagen para la cámara, pero sí que tenemos un sensor IR de reconocimiento facial para Windows, que junto al TPM añadirán un buen nivel de seguridad.

Teclado y touchpad

Continuamos ahora con el teclado del Slimbook Executive 16, optándose por un formato completo con teclado numérico y fila de teclas F por supuesto. Lo ideal hubiese sido eliminar el numpad, pero estamos de acuerdo en que para un equipo pensado para propósito general puede ser interesante su uso.

Tenemos una distribución en perfecto español, elegible a la hora de comprar el equipo, utilizando teclas tipo isla cuadradas del 15×15 mm completamente planas y con un acabado liso de tacto gomoso que agarra bien. El color negro y caracteres blancos permiten verlas bastante bien con poca luz, pero lo ideal es utilizar su sistema de retroiluminación blanca con dos niveles de brillo.

Su membrana quizás sea el pequeño punto débil que tiene, ya que parece más enfocada a gaming al aportar sensaciones directas en la pulsación, con un rebote bastante sonoro y poco acolchado. Esto hace que sea un teclado ruidoso y poco suave para mecanografía, y la zona central no es tan rígida como debería al hundirse un poco si pulsamos con fuerza. De hecho, esta zona central también se calentará bastante cuando estamos jugando o llevando a cabo tareas exigentes.

El touchpad sí que lo notamos a un nivel superior al teclado, teniendo como característica principal su enorme amplitud de 155 mm de ancho y 100 mm de profundidad, que proporciona un propicio control de la pantalla para tareas de precisión. Los botones principales tienen una perfecta integración en el borde inferior, con poco recorrido, silenciosos y bastante blanditos. El trackpad estará dividido en dos zonas, y a través de unos botones táctiles en las esquinas superiores podremos desactivar la mitad del mismo (botón derecho) o bien al completo (botón izquierdo) con dos toques rápidos.

Software de control

Slimbook ha creado un software de control para gestionar una gran cantidad de aspectos de este portátil, aunque todavía con un planteamiento básico en lo que a interfaz se refiere. No obstante es más completo en variedad de opciones que algunos de la competencia. Estará disponible en varios idiomas, aunque en español por ejemplo faltan por traducir algunos apartados.

El primer apartado al cual accedemos desde el menú principal será el de opciones generales, donde tenemos switches para modificar el comportamiento de algunas teclas como Windows o FN o modo carga por USB mientras hiberna el equipo. Permite desactivar conectividad o periféricos, mostrar información rápida del juego en pantalla como FPS o incluso reasignar teclas. Pero la opción más importante del apartado será Nvidia Optimus para alternar entre iGPU y GPU, pudiendo modificar el refresco de la pantalla en modos fijo o dinámico.

Desde el apartado de rendimiento se puede modificar el perfil de ventilación en base al ruido que genera, o activar un modo básico que rendirá más en juegos o crear múltiples modos de rendimiento. En el apartado de batería tenemos incluso la monitorización de la capacidad restante, así como tres modos de uso en base a la vida útil que queramos darle a la batería. Se puede modificar el comportamiento de carga del puerto USB-C, lo cual es algo que pocos equipos permiten.

Ya hemos comentado sobre la posibilidad de asignar perfiles de color a la pantalla y modificar su perfilado, aunque el modo de fábrica es el que mejor calibración ofrece. Finalmente podremos ajustar el brillo y tiempo de actividad de la retroiluminación teclado, o ver un completo resumen del hardware del equipo. Incluso se ha creado un monitor de recursos bastante completo y fácil de leer para todos los recursos del equipo.

Características internas y hardware

Llega el momento de acceder al interior del Slimbook Executive 16, procedimiento nada complicado al solo necesitar retirar los tornillos inferiores y separar delicadamente la tapa del resto del cuerpo con alguna herramienta.

Tenemos un potente procesador como es el Intel Core i7-12700H, modelo de arquitectura Intel 7 Alder Lake provisto de 6 P-core trabajando a 4,7 GHz y 8 E-core a 3,5 GHz combinando así capacidad para gaming y tareas exigentes con multitarea de baja intensidad con un total de 20 hilos. Posee 24 MB de caché L3 y un TDP de 45W, más exigente en consumo que los Ryzen Zen 3+ pero también más potente. En el mismo encapsulado tenemos gráficos integrados Intel Iris Xe con 96 unidades de ejecución a 1,4 GHz que se activarán en modo batería para disminuir el consumo.

Y es que acompañando a esta CPU tenemos una tarjeta gráfica Nvidia RTX 3050 Ti Laptop, la versión de gama baja enfocada a tareas 3D un poco más ligeras, pero siendo capaz de mover juegos triple A. Cuenta con un chipset GA107 Ampere de 8 nm compuesto por 2560 CUDA Cores, 80 Tensor Cores de 3ª Gen y 20 RT Cores de 2ª Gen corriendo a 1035 MHz al fijar su TDP en 65W, siendo esta la configuración de referencia. A su vez cuenta con 4 GB de memoria VRA GDDR6 ajustada a 1375 MHz (11 Gbps) en un bus de 128 bits y ancho de banda de 176 GB/s.

Sobre la configuración de memoria RAM tenemos nada menos que 64GB a través de dos módulos SODIMM de tipo DDR4 a 3200 MHz, siendo la máxima capacidad disponible para el equipo. El almacenamiento se completa con un SSD Gen4x4 Samsung 980 Pro de 1 TB, el modelo de mayor calidad que podríamos encontrar en un portátil.

Los dos elementos anteriores podrán ser configurados en el momento de la compra por parte del usuario, siempre que lo hagamos en la tienda oficial de la marca. La configuración base del equipo (sin coste añadido) será de 16 de RAM y 500 GB SSD Toshiba Goodram. Mientras que la configuración tope de gama traerá 64 GB de RAM y hasta 4 TB de almacenamiento SSD Gen4x4 con opción a configurarse en RAID 0 o 1 al tener una segunda ranura M.2 libre.

El disipador de este Slimbook Executive 16 utiliza un doble ventilador tipo turbina, pero de distintos tamaños para el situado en el lado de la GPU, más grande y el de la CPU un poco más pequeño. Ambos expulsan el aire por la parte trasera a través de unos bloques de cobre aleteado. Un total de 3 heatpipes de cobre transportan el calor desde los chips hasta el borde, utilizando cold plate separados que también refrigeran VRAM por parte de la CPU y VRM por parte de la CPU.

Autonomía

El Slimbook Executive 16 equipa una batería de polímetro de Litio con 82 Wh y 5168 mAh de capacidad compuesta por 4 celdas, así como un adaptador de alimentación de 120W más que suficiente para el hardware disponible.

Las cifras de autonomía que hemos obtenido en el mejor de los casos han sido de 8 horas; haciendo tareas básicas de edición Word, navegación con Wi-Fi y utilizando el modo ahorro con brillo de pantalla al 35%. Cifra muy buena para este hardware, aunque teniendo en cuenta que esta es la mejor cifra que hemos podido sacar, y bajo mayor estrés el consumo aumentará bastante.

Pruebas de rendimiento

Pasamos a ver en acción este Slimbook Executive 16 con las pruebas de rendimiento que realizamos habitualmente. Éstas se han llevado a cabo con el equipo enchufado a la corriente y perfil de rendimiento gaming.

Benchmarks

Realizamos a continuación los siguientes test sintéticos para CPU, GPU, RAM y SSD:

• Cinebench R15, R20 y R23
• PCMark 8 y 10
• 3Dmark Time Spy, Fire Strike, Fire Strike Ultra y Port Royal
• VRMark Orange Room
• CrystalDiskMark
• Aida64

Rendimiento en juegos

Pasamos a ver el rendimiento del Slimbook Executive 16 realizando pruebas con juegos de alta exigencia, algunos de ellos con trazado de rayos, en FHD y 2K.

• Shadow of the Tomb Rider, Alto, DirectX 12 / Ray Tracing + DLSS Equilibrado
• Far Cry 5, Alto, DirectX 12
• DOOM Eternal, Ultra, Vulkan
• Final Fantasy XV, standard, DirectX 12
• Deus EX Mankind Divided, Alto, DirectX 11
• Metro Exodus, Alto, DirectX 12 / Ray Tracing + DLSS
• Control, Alto, Ray Tracing, DirectX 12
• Call of Duty Modern Warfare, Alto, Ray Tracing + DLSS, DirectX 12
• Cyberpunk 2077, Ultra, Ray Tracing + DLSS Rendimiento, DirectX 12
• Wolfenstein Youngblood, DirectX 12, Ray Tracing + DLSS Equilibrado

El comportamiento de esta 3050 Ti en juegos es más que aceptable en resolución Full HD, obteniendo cifras superiores a los 60 FPS en calidad alta, e incluso rozando esos 90 FPS en algunos casos.

Si queremos aprovechar mejor la fluidez de la pantalla debemos bajar a calidad media en la mayoría de casos, y con los 4 GB de VRAM bastará para muchos de los títulos actuales siempre que no tengan trazado de rayos, donde sufre bastante más por la mayor exigencia gráfica.

Temperaturas

El proceso de estrés al que ha sido sometido el Slimbook Executive 16 ha durado alrededor de 60 minutos. Se ha llevado a cabo con Prime95 y FurMark, y la captura de temperaturas con HWiNFO.

Las temperaturas son mejores de lo que cabía esperar en un equipo con 12700H y tan solo 18 mm de grosor. Esto se debe también a que la frecuencia máxima en todos los núcleos simultáneamente bajo estrés es de 3,30/2,5 GHz, inferior a lo que es capaz realmente la CPU, quizás porque esté así configurada de serie para evitar el thermal throttling, que evidentemente no hay.

Sin embargo lo que preocupa un poco más es que la superficie del teclado por la zona central se calienta bastante hasta el punto de incomodar en el uso de las teclas. Estamos hablando de un escenario de gran exigencia como el gaming para un equipo enfocado a uso general, pero denota que el aislamiento superior no es demasiado bueno en cuanto a transferencia de calor.

Palabras finales y conclusión acerca del Slimbook Executive 16

Entre los puntos destacados de este portátil después de nuestro análisis podemos citar la presencia de un hardware bastante equilibrado en lo que a potencia para multitarea, aplicaciones profesionales e incluso gaming se refiere. El i7-12700H junto a la RTX 3050 Ti han podido lidiar con juegos potentes, indicativo de que serán perfecto para tareas de creación de contenido y BIM/CAD. Sin embargo en su configuración de serie las frecuencias de reloj vienen un poco bajas, quizás para evitar el throttling. La batería también ha cumplido con las exigencias con 8 h de autonomía, siendo clave una buena gestión de recursos con Nvidia Optimus y refresco adaptable para la pantalla.

El diseño nos ha parecido excelente tanto en estética como calidad de los materiales, luciendo como un equipo Max-Q de gama alta gracias a su inspiración en los MacBook Pro con el teclado negro y enorme touchpad. De hecho es el periférico que más nos ha gustado por el buen manejo que da en aplicaciones de precisión. La pantalla está a un gran nivel con resolución 2K, 90 Hz, una buena calibración y contraste de serie.

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Una pega que lo ponemos en cuanto a refrigeración son las altas temperaturas que sufre la superficie del teclado en tareas de elevado estrés, hasta el punto de incomodar en su uso. El teclado tiene margen de mejora en la membrana que es poco acolchada y sonora, inclinándose por sensaciones más gaming de las que nos gustaría. Su audio integrado se queda por detrás de lo que esperábamos, muy normalito en potencia, calidad y sensaciones, aunque similar a muchos equipos gaming de gama media.

Ese podría ser el balance general tras varios días de uso con el Slimbook Executive 16, el cual se encuentra a un precio base de 1522€, cifra ajustada en comparación con portátiles similares en prestaciones, aunque con cosas que mejorar. Un aspecto muy a valorar es que durante la compra podremos configurar a gusto el almacenamiento, memoria RAM, distribución de teclado y sistema operativo, añadiendo incluso un hub para ampliar puertos. La versión tope de gama se situaría en los 3014€ con 4 TB + RAID 0 + 64 GB RAM + Windows 11 Pro.

El equipo de profesional review le otorga la medalla de oro: