Nueva actualización BIOS para las placas base ASUS AM5 cuyo fin es evitar más AMD Ryzen 7000 quemados. Te contamos la nota de prensa de los taiwaneses y la posible verdad que hay detrás de todo este escándalo.
Una pena que una familia como la de Zen 4 se haya visto tan salpicada por un problema de voltajes en las placas base. Diseñar una plataforma completamente nueva tiene sus pros y contras, además de cambiar de tipo de socket. ASUS aporta su granito de arena, y nos apoyamos en unos compañeros (que seguro que conoceréis) para profundizar sobre el tema.
ASUS lanza la actualización BIOS para proteger sus placas base AM5
ASUS ha trabajado conjuntamente con AMD para solucionar este problema, así como habrá tenido constancia del feedback o de la situación de las otras marcas rivales de sector. AMD ha sido esencial para esta nueva actualización de BIOS que ASUS brinda a sus usuarios con Ryzen 7000 y placas base AM5 de la marca.
Efectivamente, se ha procedido a limitar el voltaje SOC a 1.3V, tal y como han hecho las demás marcas. Para descargar esta actualización, tenéis que dirigiros a la web de ASUS, elegid vuestro modelo y la BIOS más reciente, descargarla, pasarla a un pen e instalar el nuevo firmware.
Si no sabéis cómo se hace, podéis echar un vistazo al tutorial de cómo actualizar la BIOS de la placa base.
Investigación exhaustiva de los AMD Ryzen 7000 quemados
Como nos ha parecido tan bueno el trabajo que han hecho nuestros compañeros de Gamers Nexus, nos vemos obligados a compartirlo. Han cogido un AMD Ryzen 7800X3D y le han hecho pruebas de fallos a través de rayos X, microscopio electrónico, tomografía, laminografía escaneado acústico, decapsulación y muchas cosas más.
Las conclusiones que han extraído son variadas tras quemarse el chip, algo que, si ocurre, es irreversible y no se puede arreglar. Avisan de que, como un incendio provocado en bosque, es difícil localizar la fuente original del fuego.
Aseguran que ocurre como un efecto domino, causando una concatenación de errores: un fallo provoca otro, y otro al otro, etc. Según han visto, la capa dieléctrica se rompió al nivel de transistor, pudiéndose causar esa degradación por el VSOC excesivo sobre un largo período de funcionamiento, o como resultado de una mala protección térmica combinado por un alto VSOC.
El AMD Ryzen 7800X3D que probaron sufrió un quemado en la capa dieléctrica, el cual es irreversible y no se puede arreglar, incluso bajando el SOC. La mejor esperanza es detener el daño producido o prevenirlo de una futura degradación.
En el momento en el que se produce una filtración de calor, éste no para de crecer, lo que catalogan como un «ciclo vicioso del que no se puede escapar». Por tanto, se produce un cortocircuito y se termina por derretir el encapsulado del chip.
Desde Gamers Nexus creen que esta quemazón puede afectar a componentes cercanos, viendo que la corriente puede romper el DIE y quemar los metales que hay dentro. Según observaron, se alcanzan los 160ºC sin dificultad, causando un fallo a la hora de transferir el calor al IHS de la CPU para, luego, llegar al disipador.
En ese punto, el calor no puede escapar al IHS y está forzado a ir a través del silicio y el sustrato (dirección opuesta). Esto lo observaron en un test con cámara térmica en la que vieron que el sustrato estaba más caliente que el IHS.
Una vez que la corriente supera la capacidad de corriente que puede soportar el sustrato y las capas de enrutamiento, es posible que la señal se fusione internamente y finalmente explote debajo del socket LGA.
Con todo esto, el equipo de Gamers Nexus preguntó a su analista de fallos qué otros tipos de fallos podrían añadirse a la lista. Ojo a lo que respondió:
Podría haber una serie de defectos de aplicación/ambientales/fabricación que contribuyan al fallo del dispositivo: contaminación iónica, corrosión, crecimiento dendrítico, intermetálicos, latchup, fuga térmica, ruptura dieléctrica o atrapamiento de carga debido a alta VSOC (…).
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