La memoria RAM DDR5 ya es una realidad, siendo la serie 600 de Intel la primera plataforma de escritorio en adoptar esta memoria. Vamos a repasar sus especificaciones, las mejoras respecto a DDR4 y las novedades que traen consigo.
Llega una nueva era a las plataformas domésticas (escritorio y portátiles), marcada por la novedad de DDR5, una memoria RAM que parte de los 4.800 MHz de frecuencia en los módulos. Además, veremos un aumento de tamaño de memoria total, siendo más común la configuración de 32 GB por placa. Repasaremos las opciones que nos dan AMD e Intel, tanto en portátiles, como en escritorio.
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Se trata de la evolución de DDR4, cuyas mejoras principales son más densidad por módulo, mayor ancho de banda y un consumo de energía más reducido. DDR5 puede multiplicar por 4 la memoria RAM total por plataforma: antes teníamos el límite de 128 GB, pero ahora podemos alcanzar 512 GB en 4 ranuras.
Si nos vamos a plataformas entusiastas como las de Intel Xeon o AMD Threadripper, podríamos aprovechar 8 ranuras para llegar a 1 TB de memoria RAM. A nivel doméstico esto es una burrada, pero a nivel profesional es una gran noticia, especialmente para los servidores.
Estamos hablando de que DDR4 ofrecía hasta 16 GB por módulo como máximo, pero DDR5 puede llegar hasta 64 GB por módulo. Esto es gracias a que DDR5 admite el apilamiento de matrices, llegando a las 8 matrices en un mismo módulo. En un futuro, podríamos ver módulos DDR5 que vengan con 2 TB, lo que es una barbaridad.
Para el mercado genérico, puede que lleguemos a ver 128 GB por módulo, pero eso será probablemente alrededor de 2024-2025 (si no ocurre antes). Desde su salida en 2021, los primeros módulos vienen con 16 GB y 4.800 MHz de frecuencia. Y hablando de frecuencia, tenemos que irnos a JEDEC y a sus especificaciones: DDR4 terminó en DDR4-3200, mientras que DDR5 comienza en DDR5-3200.
Otra de las novedades es que no hay más pines que en DDR4: vienen con 288 pines, pero los pinouts son distintos. Trae consigo el cambio de la posición de la muesca para evitar que instalemos DDR5 en ranuras DDR4 o al revés. Dicho esto, ASUS ya ha trabajado en un supuesto adaptador DDR4 a DDR5 para módulos DDR4.
El objetivo es que el usuario que se quiera comprar una placa base ASUS con DDR5 pueda reutilizar sus módulos más antiguos provisionalmente. Esto es debido al alto precio inicial de DDR5, algo que empuja a los usuarios a seguir utilizando DDR4 por su barrera de entrada.
Por otro lado, tenemos los canales de memoria:
Esto mejora la eficiencia y reducen la latencia a la hora de acceder a los datos, ya que también se ha duplicado la longitud de la ráfaga de BL8 a BL16. Para poneros en situación, mirad estos ejemplos:
La última mejora, pero no menos importante, es el consumo: DDR5 trabaja con un voltaje de 1.1V, mientras que DDR4 hace uso de 1.2V como mínimo. Aun así, quiero hacer un apunte aquí:
Intel ha sido la primera plataforma en introducir el soporte de memoria RAM DDR5 en escritorio a través de su socket LGA1700. Por su parte, AMD ha introducido sus Ryzen 6000 para portátiles, los cuales son únicamente compatibles con DDR5 o LPDDR5.
Aunque Intel ofrece la posibilidad de comprar una placa base de la serie 600 con DDR4, ofrece su alternativa en DDR5. Sin embargo, AM5 será un socket que solo admitirá DDR5, el cual saldrá a finales de 2022 junto con los Ryzen 7000 con arquitectura Zen 4.
Por el momento, las novedades que sabemos son las siguientes.
Intel aprovecha la toma de ventaja respecto al soporte de DDR5 estrenando nuevos perfiles XMP, ideal para quienes buscan hacer overclock en la RAM. La novedad es que ahora tenemos 5 perfiles XMP que podemos modificar, así como guardar 2 perfiles XMP totalmente personalizados.
El primer cambio es el SPD o Serial Presence Detect, lo que significa que tendremos 2 perfiles XMP que se pueden actualizar, pudiendo usar uno en caso de que se corrompa el otro.
El segundo es el aumento de espacio en XMP 3.0, otorgando hasta 384 bytes de memoria. Gracias a ello, los perfiles como SPD son seleccionables desde BIOS, ya que antes veíamos 102 bytes en XMP 2.0.
Decir que esto no es solo una novedad para DDR5, sino también para DDR4, debiendo usar módulos certificados con Intel XMP 3.0 si es que queremos disfrutar de sus especificaciones o mejoras.
Intel nos ha traído la posibilidad de que podamos hacer overclock a la memoria RAM con Windows encendido, sin tener que ir a la BIOS para ello. Es más, su tecnología Dynamic Memory Boost es mucho más interesante: overclock automático, según la demanda de memoria del S.O.
Esto significa que podemos ir cambiando de perfil JEDEC junto con los perfiles XMP 3.0 para ir seleccionando entre ahorro de energía o máximo rendimiento en nuestras memorias RAM.
Hemos visto un ligero incremento de FPS en nuestro banco de pruebas, pero hay que decir que gran parte de la culpa la tienen los propios procesadores Intel Alder Lake-S. La memoria RAM puede dar un empujón extra de hasta 5 FPS, pero no se debe esperar nada más fuera de ahí.
La gran razón por la que, en nuestro banco de pruebas, vemos que los procesadores de 12ª generación Intel superan a los Ryzen 5000, se debe la nueva arquitectura y el proceso de 10 nm (Intel 7). Sin embargo, AIDA64 es clave para comprobar el rendimiento en memorias RAM, y aquí hemos visto como los i9-12900K o i5-12600K han barrido a sus rivales.
Las velocidades de lectura y escritura son claramente superiores, pero ya sabéis lo que ocurre cuando subimos la frecuencia de los módulos: sube la latencia. Y en este aspecto, AIDA64 ha desvelado que la latencia de DDR5 es peor que la de DDR4, algo que era de esperar.
Tras el éxito que tuvo la serie Dominator y Vengeance de Corsair, no podemos desaprovechar esta entrada para irnos sin recomendaros algunos de los modelos de la marca americana en DDR5. Todavía es pronto para que los fabricantes tengan mucho catálogo de DDR5, pero hasta ahora Corsair ofrece memorias de hasta 5.600 MHz.
Para los más exigentes, tenéis las Corsair Dominator Platinum de 5600 MHz con un total de 32 GB en el pack y una latencia de CL36. Vienen con un disipador con iluminación RGB que se puede sincronizar con iCUE, así como con certificación Intel XMP 3.0.
Por cuestiones de precio, no queremos recomendaros las de 4.800 MHz, ya que las de 5.200 MHz solo cuestan 5€ más y nos parecen mejor opción. Así que, las Corsair Vengeance DDR5 de 5.200 MHz vienen en un pack de 32 GB (2×16) con una latencia más elevada: CL40. Eso sí, están preparadas para overclock y vienen con soporte Intel XMP 3.0.
Este kit lo probamos nosotros en nuestra review de Corsair Vengeance DDR5, llevándose la medalla de Platino de Profesional Review.
DDR5 tiene unas capacidades espectaculares y es el salto que necesitaban las empresas para poder funcionar de forma más fluida, soportar más carga de trabajo, etc. En nuestra comparativa DDR4 vs DDR5, dejamos claro que sigue siendo una gran opción para presupuestos ajustados.
Por el contrario, DDR5 es la apuesta de futuro y es una gran solución, solo que el panorama actual es un poco preocupante porque no hay mucho stock y los precios son muy altos. Estamos ante la misma situación que con la salida de DDR4: precios altos y la tesitura de cambiar plataforma o no. En este sentido, Intel ha sido lista sacando placas base con DDR4 y DDR5 para aquellos que quieran actualizar y aprovechar sus módulos.
Sin duda que, cambiar a la memoria RAM DDR5 es un gran acierto de cara al futuro, pero no esperéis que vuestros juegos experimenten una subida de 10 FPS porque no va a pasar. Tal y como conocemos los videojuegos… son muy dependientes de GPU y CPU, más que de otros componentes.
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