Tenemos con nosotros la MSI RX 6600 XT Gaming X 8G, una de las GPU principales por así decirlo que nos quedaban por analizar. Aprovechando el lanzamiento de la 6600, la marca taiwanesa nos ha enviado su modelo Gaming X de mejor rendimiento gracias a una frecuencia boost de 2607 MHz y un excelente disipador TWIN FROZR 8 con doble ventilador y muy silencioso. La baja disponibilidad continúa en las gráficas, pero tendréis los datos de una más para saber cual es el mejor modelo que podéis comprar ¡comencemos la review!
Debemos agradecer a MSI su confianza en nosotros por cedernos temporalmente esta tarjeta para su análisis.
MSI utiliza una configuración de caja un poco diferente en la gama media/baja de tarjetas, pues solamente tenemos un envoltorio de cartón rígido en lugar de caja flexible y dentro otra rígida. Esto no es obstáculo para ver una bonita presentación mostrando para tarjeta con un acabado tipo vinilo para la impresión, y parte de sus características destacadas en la cara inferior.
Al abrir esta caja, debemos extraer lo que sería un cajón de cartón en donde vendrá colocada la tarjeta entre un molde de espuma de polietileno. A su vez, una tapa protegerá la zona superior y una bolsa aislante la propia tarjeta.
En el interior encontramos:
Esta MSI RX 6600 XT Gaming X 8G se basa en el disipador TWIN FROZR de 8ª generación, el cual nos presenta un estilo muy agresivo en la zona de ventiladores a la vez que un elevado rendimiento en refrigeración por aire. El fabricante ha considerado que un sistema de dos ventiladores es suficiente para los 160W de TBP de esta tarjeta, lo que beneficia a las medidas del bloque en longitud con 277 mm.
Debería de asegurar compatibilidad con la mayoría de chasis del mercado, aunque tengamos en cuenta que sus 51 mm de grosor la convierten en una GPU bastante gruesa. Podría plantearnos problemas de cara a su uso en montajes verticales al ser la mayoría de 2 slots. En cualquier caso, siempre hay chasis que soportan mayor grosor, así que deberíamos fijarnos en esto en nuestra próxima compra.
La carcasa que sostiene a los ventiladores se ha construido en plástico rígido bastante grueso con un gran trabajo de diseño detrás. Para ella se utiliza una combinación de negro mate con gris en las formas angulares 3D que componen las zonas circundantes a los ventiladores. Estos aprovechando bastante bien el espacio, y su abertura en forma de prisma generan una estética muy llamativa estilo futurista. Tengamos en cuenta que en este modelo se ha simplificado la estética en comparación con la 6700 XT por ejemplo, pues no tendremos zonas de iluminación entre los ventiladores.
Seguimos en la zona superior para conocer el sistema de doble ventilador, el cual se basa en TORX FAN 4.0. Este sistema une las hélices de cada unidad dos a dos con un anillo exterior, permitiendo enfocar el flujo de aire hacia el radiador a la vez que aumenta la presión estática a su paso. Cada unidad tiene un diámetro de 100 mm efectivo, rodamiento de bolas doble y capacidad de giro hasta las 3500 RPM. A pesar de su tamaño, son muy silenciosos y veremos que está lejos de utilizar su máximo rendimiento en condiciones normales debido a lo bien que disipan el calor. Como siempre, tenemos sistema de refrigeración semi-pasivo que apaga los ventiladores mientras la GPU esté en reposo.
Continuando con las zonas laterales de la MSI RX 6600 XT Gaming X 8G se presentan cerradas solamente en el grosor que ocupan los ventiladores. De esta forma el flujo de aire se canaliza por el disipador para posteriormente ser expulsado por la zona que queda abierta bajo él. Este mecanismo es básico en todos los disipadores de GPU, y en este caso no es la excepción, aunque el frontal lo tendremos también abierto para incrementar el rendimiento. En el lateral visible se ha colocado una zona de iluminación Mystic Light coincidiendo con el logotipo y nombre de la marca.
Finalmente llegamos a la parte trasera de la tarjeta para ver que está cubierta mediante un backplate de aluminio en color negro. Se basa en un diseño plano con varios acabados en superficie, pero sin iluminación. La zona del socket permanece cerrada, pero en el extremo presenta una abertura que permite al flujo de aire atravesar el disipador para incrementar la efectividad. No se dispone de sistema Dual BIOS en este modelo, aunque sí que tenemos un armazón metálico bajo la PCB que ayudará a sujetar y dar rigidez a todo el conjunto.
La distribución de puertos de la MSI RX 6600 XT Gaming X 8G será similar a otros modelos de la marca, encontrándonos con:
La capacidad máxima de 4 fuentes de vídeo, aunque se le ha dado más protagonismo a la interfaz DisplayPort igual que ocurre en la mayoría de modelos de gama media y baja. HDMI 2.1 soporta resoluciones máximas de 8K @ 120 FPS y 4K @ 144 FPS, pero cierto es que, al ser una tarjeta menos potente, será muy difícil obtener tal rendimiento en un juego.
MSI ha optado por implementar solo una cabecera EPS de 8 pines, más que suficiente para los 160W de TBP que consume la tarjeta, o el pequeño extra si hacemos overclocking. La interfaz principal será PCIe 4.0 x16 con 8 carriles operativos, y la función Smart Access Memory por supuesto estará disponible para ella.
Procedemos a abrir esta MSI RX 6600 XT Gaming X 8G para ver con más detalle la construcción de la PCB y el diseño del disipador, artífices de una de las mejores tarjetas 6600 XT del mercado.
El disipador de la MSI RX 6600 XT Gaming X 8G está formado por un bloque doble unido entre sí mediante varios tubos de calor. Ambos bloques presentan un aleteado transversal con un borde de ataque AirFlow Control en forma ondulada, que disminuye el ruido al paso del aire. Obviamente estarán construidos en aluminio en su totalidad, mientras que los tubos serán de cobre para transportar más rápidamente el calor.
En bloque principal cuenta con un amplio cold plate de aluminio con superficie pulida, montando un núcleo de 4 heatpipes de cobre bajo él para recoger de forma eficaz del calor que genera el chipset. El contacto entre chipset y tubos se hace mediante pasta gris, el sistema habitual. El área periférica del cold plate se encarga de refrigerar los 4 chips de memoria GDDR6 a través de almohadillas térmicas de alta conductividad.
Esta serie de heat pipes transportan el calor hacia un segundo bloque, un poco más amplio que incrementa la efectividad. Parte de estos tubos también giran sobre sí mismos para meterse en el bloque primario y hacer un mejor reparto del calor. Dos placas metálicas se encargarán de refrigerar el VRM a través de almohadillas térmicas.
La PCB de esta que ha construido MSI para esta tarjeta ocupará toda el área disponible del disipador, un tamaño extendido que permite separar bien los componentes para refrigerarlos mejor. El VRM consiste en 8 + 2 fases divididas en 3 zonas, provistas de MOSFETS tipo DrMOS de triple estado, chokes metálico y capacitores de alto rendimiento para asegurar la máxima estabilidad. Estarán muy bien refrigerados mediante el disipador principal gracias a placas de aluminio.
Esta MSI RX 6600 XT Gaming X 8G se basa en el chipset Navi 23 XT construido a partir de un proceso de fabricación de 7 nm por TSMC, dando vida a la arquitectura RDNA 2. En su interior tenemos 32 unidades de computación y mismo número de núcleos para trazado de rayos, siendo una de las novedades de la arquitectura. Las unidades de sombreado pasan a ser un total de 2048, 64 unidades por cada UC, generando 64 ROPs y 128 TMUs. El gran avance en la eficiencia e IPC hacen que esta 6600 XT rinda 1,4 veces más que la 5600 XT, situándose por encima de la RTX 3060 de Nvidia.
En este caso MSI ha aumentado la frecuencia boost hasta un máximo de 2607 MHz en modo boost (2589 MHz en la tarjeta de referencia), coincidiendo con otros modelos custom como la Gaming OC Pro de Gigabyte. La frecuencia base permanece invariante, y como siempre, dispondremos de capacidad de overclocking manual para este modelo. Cabe decir que en el sensor de GPU-Z o Radeon Software hemos obtenido una frecuencia de reloj real máxima de 2657 MHz, y constante de 2650 MHz, superando así lo especificado. Todo ello con un TBP de 160W, igual que el del modelo de referencia.
La configuración de memoria RAM gráfica consiste en 8 GB a partir de 4 chips Samsung GDDR6 trabajando 2000 MHz de frecuencia de reloj. Genera una transferencia efectiva de 16 Gbps, la máxima disponible para esta arquitectura. En contraposición, el bus baja a 128 bits, resultando en un ancho de banda de 256 GB/s. Podría ser un pequeño hándicap respecto a sus rivales de 192 bits, pero AMD ha solventado el problema con un bloque de cache L3 de 32 MB llamado Infinity Cache el cual acelera la transferencia de datos entre memoria y GPU. Gracias a la tecnología AMD Smart Access Memory podremos eliminar los límites fijados por el bus PCIe y su Base Access Register (BAR) para incrementar el rendimiento de la tarjeta en torno a un 3 – 4%.
Llega la hora de analizar el rendimiento de la MSI RX 6600 XT Gaming X 8G para ver donde se sitúa en nuestra tabla de resultados. Para ello utilizaremos el banco de pruebas Intel habitual compuesto por los siguientes elementos:
|
| |
| Procesador: | |
| Placa Base: | Asus Maximus Formula XII |
| G.Skill Trident Z Royal RGB 16GB @3600 MHz | |
| Disipador | |
| Disco Duro | |
| Tarjeta Gráfica | MSI RX 6600 XT Gaming X 8G |
| Fuente de Alimentación | Cooler Master V850 Gold |
| Monitor | Viewsonic VX3211 4K mhd |
Los test se han realizado con la configuración por defecto de cada programa. Hemos ejecutado todas ellas sobre el sistema operativo Windows 10 Pro y los drivers Adrenalin actualizados a su última versión.
La jugabilidad de una tarjeta gráfica podríamos valorarla en los siguientes escalones según el framerate que entregue:
| FRAMES POR SEGUNDO | |
| Frames por Segundo (FPS) | Jugabilidad |
| Menos de 30 FPS | Injugable |
| 30 ~ 40 FPS | Jugable |
| 40 ~ 60 FPS | Buena |
| Mayor de 60 FPS | Excelente |
| Mayor de 144 Hz | Realista |
Para las pruebas de benchmark utilizaremos los siguientes test sintéticos:
Veamos ahora el rendimiento en juegos de la MSI RX 6600 XT Gaming X 8G. Las pruebas las vamos a realizar a resoluciones Full HD (1920x1080p), 2K (2560 x 1440p) y 4K (3840 x 2160p) con la siguiente configuración gráfica.
También queremos ver el rendimiento con Ray Tracing en las mismas resoluciones usadas en el apartado anterior. Lo haremos con los siguientes juegos y configuraciones:
Se ha probado su rendimiento en renderizado para ver cómo afecta el aumento de frecuencia que ha hecho la marca:
Continuamos ahora con la prueba de overclocking manual en la MSI RX 6600 XT Gaming X 8G. Hemos utilizado Radeon Software. Para ver la mejora en números, hemos hecho una nueva prueba en 3DMark y Shadow of The Tomb Raider en las tres resoluciones.
| Shadow of the Tomb Rider | Stock | @ Overclock |
| 1920 x 1080 (Full HD) | 150 FPS | 156 FPS |
| 2560 x 1440 (WQHD) | 102 FPS | 108 FPS |
| 3840 x 2160 (4K) | 55 FPS | 58 FPS |
| 3DMark Fire Strike | Stock | @ Overclock |
| Graphics Score | 27443 | 28754 |
| Physics Score | 28208 | 28410 |
| Combinado | 23260 | 22832 |
Con el software de AMD hemos podido exprimir esta tarjeta aplicando un aumento de frecuencia de GPU hasta 2837 MHz, en VRAM de 2220 MHz sin necesidad de aumentar el power limit. Con total estabilidad en juegos y benchmarks, hemos conseguido un aumento de 6 FPS en FHD, 6 FPS en 2K y 3 FPS en 4K con Shadow of the Tomb Raider.
Seguidamente obtendremos las cifras de temperaturas y consumo de la MSI RX 6600 XT Gaming X 8G en su frecuencia de stock. Hemos usado FurMark para el estrés, HWiNFO para ver la telemetría, y un vatímetro que mide la potencia de todo el equipo excepto el monitor. La temperatura ambiente en la habitación es de 21°C.
Hemos obtenido una media de solo 55oC con la tarjeta a máxima frecuencia constante y los ventiladores girando a solo el 29% de su capacidad total. Esto pone en perspectiva el gran margen de maniobra que tiene este disipador, siendo completamente silencioso mientras jugamos hasta el punto de parecer que la tarjeta está en reposo.
El consumo obtenido a máximo estrés también resulta estar sumamente ajustado en comparación a otros modelos que superan los 200 W en este banco de pruebas. Un trabajo perfecto el que ha hecho MSI con su modelo custom que lo sitúa un poco por encima de su competencia.
Este modelo de MSI será uno de los más potentes en el segmento de 6600 XT, y lo consigue gracias a una impresionante optimización de su hardware y un disipador que ni siquiera se inmuta mientras jugamos.
Las Gaming X siempre son una garantía en cualquier generación, y esta vez se ha rediseñado su skin para parecerse a las variantes de gama alta, aunque utilizando dos en lugar de tres ventiladores. Al ser un modelo inferior, recorta detalles como la iluminación a una sola zona. MSI podría haberse permitido disminuir el grosor de esta tarjeta, mejorando con ello su compatibilidad con montajes verticales, aunque a cambio obtenemos una media de 55oC a máximo estrés y con los ventiladores apenas al 30% de su capacidad.
Aquí tienes la guía con las mejores tarjetas gráficas del mercado
Las cifras de FPS demuestran un VRM de excelente calidad y una frecuencia boost incluso superior a la especificada de 2607 MHz. Están un poquito por encima de otros modelos probados como la Gaming OC Pro de Gigabyte. Estos 2 o 4 FPS extras que obtenemos, es una diferencia relevante al tratarse del mismo chipset y especificación.
El precio de esta MSI RX 6600 XT Gaming X 8G está entre los 499 a 635 euros según la tienda en donde se comercialice. Como referencia, PcComponentes especifica unos 600 euros, aunque cualquiera de estas cifras podrá variar bastante en cada remesa a la venta, siempre condicionada a una baja disponibilidad. Si tenemos la oportunidad de conseguir una, será de las más recomendables al estar sumamente optimizada.
| VENTAJAS | INCONVENIENTES |
| DE LAS 6600 XT MÁS EXPRIMIDAS DE STOCK | POCA DISPONIBILIDAD Y PRECIOS ELEVADOS |
| TEMPERATURAS ESPECTACULARES Y DISIPADOR SILENCIOSO | |
| ESTÉTICA DEPURADA Y TAMAÑO COMPACTO | |
| PCB DE GRAN CALIDAD Y POTENTE VRM | |
| OVERCLOCKING ESTABLE Y NOTORIO |
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