El Ryzen 9 7900X se ve las caras frente a frente contra el Ryzen 9 5900X, procesadores de la arquitectura Zen 4 vs Zen 3. Naturalmente, el CPU Zen 4 va a ofrecer un rendimiento mayor al dar el salto hacia una arquitectura totalmente actualizada, aunque aquí queremos saber de cuanto es esa mejora y si el desembolso vale la pena.
Vamos a intentar dilucidar cuál es la verdadera diferencia de rendimiento entre estos procesadores, con pruebas de rendimiento sintéticas y también en el rendimiento en juegos.
Para probar el Ryzen 9 7900X se ha utilizado una placa base Asus X670E Crosshair Hero junto a una memoria de 32 GB G.Skill Trident Z 5 Neo DDR5 6000 MHz. La refrigeración corre a cargo del MSI Coreliquid S360.
En estas pruebas vamos a ver el rendimiento en Cinebench R23, 3DMark FireStrike y PCMark 10.
En las pruebas de Cinebench R23, vemos que la diferencia a favor del 7900X es del 25% en un solo núcleo, así como una diferencia del 37% en multinúcleo. En 3DMark FireStrike la diferencia a favor del chip Zen 4 es del 18%. Por último, en PCMark10 esa diferencia es de un 16%.
Cinebench es la herramienta que más aprovecha el cambio de arquitectura, pero no tanto en el resto de pruebas.
Las pruebas de rendimiento en juegos consisten en 6 videojuegos ejecutándose en resoluciones de 1080p y en 4K. Estos juegos son el Shadow of the Tomb Raider, Far Cry 5, Doom Eternal, Final Fantasy XV, Deus Ex: Mankind Divided y Metro Exodus.
De media, el rendimiento del procesador Ryzen 9 7900X es un 7% más rápido que el Ryzen 9 5900X en resolución 1080p. Donde se ven más diferencias es en Shadow of the Tomb Raider y en Far Cry 5.
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Con una resolución en 4K la diferencia de media es de 0%, totalmente irrisoria. Esto evidencia que el salto de Zen 3 a Zen 4 no tiene mucho sentido si se va a jugar a resoluciones altas como 4K, al menos en estos juegos probados. La tarjeta gráfica utilizada es una RTX 3080 Ti.
Las siguientes tablas se hicieron con los relojes en stock, donde el 7900X alcanza un consumo eléctrico de 289 W, mientras que el 5900X alcanza un consumo eléctrico de 215 W.
Las temperaturas del 7900X sube hasta los 86 grados con una refrigeración líquida de 360 mm. La diferencia con el 5900X es abismal, ya que el procesador Zen 3 sube solo hasta los 66 grados.
Los procesadores Zen 4 consumen más energía y son más calientes para lograr alcanzar unas métricas de rendimiento que parecen afectar más al desempeño en tareas de productividad y creación de contenido más que en juegos.
Después de todo, quedará en cada usuario el poder saber si vale la pena este salto y para que lo busca. Hay varios elementos a tener en cuenta aquí, como la compra de unas placas base AM5 y memorias DDR5, una inversión cara al comienzo.
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