El paso a procesos de fabricación menores es cada vez más complicado, algo que ni siquiera la todopoderosa Intel puede evitar. Cannonlake será la primera generación de procesadores de Intel fabricados a 10 nm, estos chips deberían haber llegado ya al mercado, pero han sufrido retraso tras retraso, ahora sabemos que su producción en masa no empezará hasta el año que viene.
Todas las fundiciones trabajan muy duro para salir de los 14 nm y 12 nm de la actualidad, algo que está siendo más difícil de lo previsto, pues cada vez estamos más cerca del límite del silicio, estimado en 1 nm. Intel acaba de compartir sus resultados financieros del primer periodo del año, confirmando que la producción en masa de los primeros procesadores a 10 nanómetros, los Cannonlake, no se producirá hasta el próximo año 2019.
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Intel lleva estancada en los 14 nm desde la llegada de los procesadores Broadwell en 2014, cierto que el proceso está cada vez más depurado y es mejor, pero los 10 nm deberían haber llegado hace ya varios años. Los resultados financieros de Intel, muestran que el negocio de los PC y los servidores tiene una salud excelente, con un crecimiento del 25% respecto al periodo anterior, por lo que no hay prisas para saltar a los 10 nm.
[irp]La arquitectura Cannonlake a 10 nm supondrá un gran salto adelante en eficiencia energética y prestaciones, lo que nos permitirá ver nuevos portátiles mucho más delgados y compactos con grandes prestaciones. Uno de los primeros procesadores de esta familia será el Intel Core i3-8121U, incluido en una de las próximas unidades NUC de la compañía y que también podríamos ver en algunos Mini PCs.
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