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Cables USB magnéticos: todo lo que necesitas saber

Se están haciendo cada vez más populares, y eso ha llevado a tener mayor curiosidad por qué son los cables USB magnéticos, para qué se usan, qué ventajas tienen, etc. En este artículo podrás conocer estos nuevos cables más a fondo y si realmente te interesa comprar uno o si simplemente debes optar por un cable convencional.

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¿Qué es un USB magnético?

Los cables USB magnéticos son una innovación en el mundo de la tecnología que busca mejorar la experiencia de carga y transferencia de datos. Estos cables están compuestos por dos partes principales que debes conocer:

Clavija: esta es la parte que se inserta en el dispositivo y puede adaptarse a diferentes formatos, incluyendo conectores tipo USB-A, USB-C, Micro USB y el puerto Thunderbolt. Incluso pueden ser intercambiables, según las necesidades de cada caso. Así mismo, pueden quedarse insertadas en el propio puerto del dispositivo, y cuando lo necesites, simplemente emparejar el cable.
Cable: se trata de un cable convencional aparentemente, pero que puede tener en uno o en ambos de sus extremos una superficie magnética donde irá conectada por contacto y magnetismo la clavija. Los puedes encontrar bajo varias especificaciones, y con varias longitudes según tus necesidades.

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¿Para qué necesito un cable USB magnético?

Los cables USB magnéticos se utilizan principalmente para cargar dispositivos electrónicos y transferir datos. A continuación, se presentan algunas de las ventajas de usar estos cables:

Facilidad de uso: los cables USB magnéticos son muy fáciles de usar. Solo necesitas colocar en el dispositivo el conector USB que incluye el cable y, al acercar el cable, se unirán de forma eficaz sin importar la orientación del mismo. Es decir, dejar siempre la clavija insertada, como he comentado antes, y que así el enlace sea mucho más fácil, incluso en la oscuridad o para personas con problemas de visión, ya que al aproximarlo, el magnetismo hará todo.
Seguridad: ante una caída o tirones de cable, los cables magnéticos son más seguros y, de esta forma, alargan la vida del conector de carga. Al ser magnético, el cable se despegará del dispositivo si sufre una caída o se produce un tirón de él. De este modo se pueden evitar los problemas de holgura en los puertos o rotura de los mismos que pueden darse en dispositivos móviles, ordenadores de sobremesa, portátiles, etc.
Protección contra el polvo y la suciedad: el conector USB magnético puede dejarse conectado al dispositivo, protegiéndolo de la suciedad y el polvo, que suele ser también un problema habitual.

Consideraciones a la hora de elegir cables USB magnéticos

A la hora de elegir un buen cable USB magnético, deberías tener en cuenta las siguientes consideraciones, que son básicamente las mismas que para elegir un cable USB convencional:

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Tipo de conector: asegúrate de que el cable sea compatible con tu dispositivo. Los cables USB magnéticos suelen venir con varios tipos de conectores, como USB tipo C, Micro USB y Lightning. Elige el que sea compatible con el dispositivo que vas a conectar.
Longitud del cable: se presentan en distintos tamaños o longitudes, tienes que elegir la que sea adecuada para tu caso particular.
Calidad del cable: se considera que un cable es de buena calidad si dispone de un calibre entre 24AWG y 20AWG. Además, busca que sean compatibles con las tasas de transferencia que necesitas. Y, mucho mejor si tienen algún tipo de acabado para evitar nudos o torceduras que puedan deteriorar el cable.
Potencia de carga: algunos cables magnéticos pueden ser más lentos realizando la carga del dispositivo en comparación a usar el cable convencional. Mira bien las especificaciones del cable para ver qué potencia soporta, pérdidas, etc.