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Mejores programas para formatear en FAT32

FAT32 es uno de los sistemas de archivos más usados de la actualidad, sobre todo de cara a unidades de almacenamiento pequeñas como pendrives, o allá donde necesitemos una compatibilidad universal. Si deseas formatear una unidad de disco o USB en FAT32, en este artículo te daremos los mejores programas para ello.

Comenzaremos explicándote los métodos de formateo más interesantes en Windows, Linux y macOS, que serán básicamente programas propios de cada sistema operativo. Pero sabemos que muchos buscaréis opciones de terceros con más posibilidades, y daremos las mejores alternativas gratuitas para Windows 10. ¡Comenzamos!

Primero valora las herramientas propias de tu sistema operativo

Lo cierto es que lo primero que te vamos a recomendar no son programas de terceros, sino herramientas de tu propio sistema operativo que deberían hacer el trabajo a la perfección. Y es que no tiene demasiado sentido ponerse a hacer instalaciones de programas si ya el propio SO trae las herramientas para cubrir tus necesidades perfectamente, ¿no?

Básicamente, el sentido que tiene el software de terceros es que suele dar acceso a bastantes más herramientas que los programas integrados del SO no permiten de serie o al menos no dan una opción intuitiva de hacerlo. Por ejemplo, si tienes una tabla de particiones en la que quieres ejecutar operaciones como una redimensión que el propio SO no te permite o un cambio de posición entonces el software de terceros viene de perlas.

Dicho esto, vamos a ver qué programas para formatear en FAT32 nos integra Windows, Linux y macOS.

Administración de discos en Windows

En el caso de Windows, el programa gráfico por excelencia es la Administración de discos, y podréis acceder muy fácilmente a él mediante el menú inicio, buscando el nombre del programa o «Crear y formatear particiones del disco duro«. Otra manera de acceder es haciendo click derecho sobre el menú inicio, ya que ahí se os dará una lista de accesos directos importantes, y entre ellos estará la administración de discos.

Una vez ahí, tendremos un listado tanto gráfico como textual de todas las particiones del sistema, separadas disco a disco. Por lo que tendremos que localizar la unidad en la que queremos realizar el formateo y la partición o particiones que vamos a variar.

Entonces, si queremos formatear directamente la partición no habrá que hacer más que click derecho y usar la opción de formatear, donde podremos elegir con claridad el sistema de archivos FAT32. Si queremos borrar varias particiones y crear una única formateada, entonces tan solo será cuestión de eliminar volumen allá donde queramos y luego crear un nuevo volumen simple con formato FAT32 en el espacio libre conseguido.

La otra opción, bastante más avanzada, es hacer uso de Diskpart. Esta es una utilidad que funciona mediante línea de comandos, y no con un entorno gráfico. Por ello, tendremos más opciones y libertad, pero también será menos intuitivo para los menos experimentados.

Gparted en Linux

En el caso de Linux, es obvio que las cosas van a depender bastante de qué distribución usas. Aunque el programa que más domina es gparted, pues es un programa oficial de GNOME, podemos considerarlo el más usado y conocido, pero desde luego es muy probable que tengáis que instalarlo en vuestra distribución. Si no lo encontráis en vuestro listado de aplicaciones, ni podéis abrirlo escribiendo directamente sudo gparted en la terminal, entonces deberéis instalarlo, algo que es muy sencillo. Algunos de los comandos de terminal que nos lo permitirán son los siguientes:

  • En distribuciones basadas en Debian, sudo apt-get install gparted
  • En Fedora y derivados, sudo dnf install gparted
  • En Arch Linux y derivados, sudo pacman -Sy gparted
  • …etc

Una vez entrado en el software, elegiremos el disco en el que queremos formatear, y haremos click derecho sobre cada partición o particiones en la que vayamos a hacer los cambios. Si se nos da la opción, las vamos a desmontar.

Hecho esto, ya nos debería aparecer para formatear o eliminar cada volumen donde sea necesario, y aplicar los cambios. Realmente fácil.

Evidentemente, el repertorio de posibilidades que nos deja Linux es inmenso, y usar gparted es solo una de las decenas de opciones. También es muy obvio que la línea de comandos nos dará muchísimas vías, pues Linux es simplemente ideal para ello. Pero en esta ocasión hemos querido mostrar lo más fácil para todos.

Discos en MacOS

Al igual que en Windows, en macOS siempre tendremos a nuestra disposición una administración de discos bastante solvente. Su nombre es Utilidad de discos y para acceder a ella simplemente tendremos que ir a nuestro Launchpad, y entrar a la pestaña Otros, donde encontraremos ese software.

Ahí, se nos indicará de manera muy sencilla la lista de equipos de los que disponemos, con un botón en el que se nos dará una importante elección: si ver solo volúmenes (particiones) o ver también a qué discos pertenecen. Nosotros os recomendamos seleccionar esa opción, pues os permitirá identificar con mucha mayor facilidad qué es lo que queréis borrar o cambiar.

Hecho esto, tan solo tendréis que elegir la partición o unidad que queréis cambiar en la barra lateral, donde se dan básicamente dos opciones. La primera es particionar la unidad por completo, de tal forma que iréis a una pantalla con un cómodo gráfico en el que podréis cambiar y borrar las particiones actuales, y formatear nuevas.

La otra opción es darle directamente al botón de borrar, en el que se eliminará por completo la unidad o partición seleccionada y podréis elegir a qué sistema de archivos formatear, evidentemente en este caso buscamos que sea FAT32, llamado «MS-DOS (FAT32)» por macOS.

Mejor software de terceros para formatear en FAT32

Si la administración de discos de Windows no te ha ayudado a conseguir tu propósito, entonces la opción más razonable podría ser apostar por software de terceros, pero como te indicamos antes es algo innecesario si tan solo necesitas formatear un disco «normal» como FAT32. ¿Tiene tu caso alguna particularidad que requiera operaciones más complejas, o no te funciona el software propio de Windows? Pues vamos a ver algunos programas que te puedan ayudar.

Algunas de las operaciones que no soporta Administración de Discos y sí algunos programas de terceros son mezclar particiones, copiar particiones, convertir discos dinámicos a básicos, migración de SO, etc…

En Windows, dominan EaseUS Partition Master y Minitool Partition Wizard

 

EaseUS Partition Master y Minitool Partition Wizard son sin duda los programas más usados para administración de discos, y prácticamente se podría decir que son «la Pepsi y la Coca-Cola» o «la Visa y la Mastercard» del segmento, ya que son realmente similares y para la mayoría de la gente no importará si se usa uno u otro.

En ambos casos estamos hablando de programas freemium, es decir, no solo son de código cerrado, sino que además tienen una versión gratuita con funcionalidades limitadas y otra de pago bastante más completa. Eso sí, por nuestra experiencia reciente parece que la opción de EaseUS está yendo hacia esta dirección de una forma más pronunciada que la de Minitool.

Mucho cuidado al instalar este tipo de programas. No es que tengan virus, pero es posible que el instalador quiera instalar en el PC otro software de manera opcional pero predeterminada, así que fíjate mucho en este tipo de opciones.

AOMEI Partition Assistant

AOMEI Partition Assistant es el tercer software que os vamos a plantear aquí, y se trata de una alternativa interesante a los dos últimos, por ello está ganando importancia en el mercado. Lo que más les gusta a los usuarios es que su versión gratuita no tiene ningún adware en la instalación, y por lo que parece es mucho menos intrusivo en cuando a los avisos y anuncios que pone mientras está en uso. Así que quizás sea la opción más interesante para quienes lo quieran usar de manera asidua.

La última opción que proponemos es Paragon Partition Manager Community Edition, que también es Freemium.

Ojo con las limitaciones de FAT32

Para finalizar, nos gustaría aclararte brevemente que el sistema de archivos FAT32 tiene una importante limitación técnica que es totalmente ineludible, ya que forma parte de su especificación. Básicamente, no podréis incluir archivos de más de 4GB dentro de la unidad.

Como decimos, esta es una limitación estricta que tiene que ver con la especificación oficial de FAT32. Es algo que solo se puede burlar formateando en un sistema de archivos distinto, pudiendo empeorar la compatibilidad de la unidad con otros dispositivos. Es algo que queríamos dejar claro en el artículo.

Hemos profundizado mucho más sobre este asunto y qué alternativas son viables en nuestro artículo dedicado a explicar el error «El archivo es demasiado grande para el sistema de archivos de destino». ¡Échale un vistazo!

Palabras finales y conclusión

Si quieres formatear un USB en FAT32, nuestra primera recomendación es sin duda que aproveches una de las opciones integradas en tu sistema operativo. No tiene mucho sentido usar software de terceros si vas a ejecutar una operación sencilla como es el formateo.

En Windows, hay mil maneras pero el programa clave es la Administración de discos, donde encontrarás por completo todo lo que necesitas. Linux es un caso muy especial ya que hay decenas de posibilidades y cada distribución tendrá su software por defecto, pero nuestra recomendación principal es sin duda gparted. Finalmente, la Utilidad de discos de Mac cubrirá a la perfección tus necesidades.

En todo caso, para aquellos usuarios de Windows que busquéis un set de herramientas más complejo, os hemos hablado de los principales programas que nos lo permiten. Los principales siempre han sido easeUS Partition Master y Minitool Partition Wizard, aunque también hay otras alternativas muy solventes. Las opciones adicionales que nos permitirán serán, por ejemplo: migrar particiones, copiarlas, moverlas, etc.. de una forma mucho más detallada.

Esperamos que este artículo te haya ayudado a formatear un dispositivo en FAT32. No te olvides de que aunque es un formato excelente en cuanto a compatibilidad y muy recomendable en pendrives y tarjetas SD tiene unas cuantas limitaciones. ¡Gracias por leernos!

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