Anteriormente se había publicado un disipador térmico pasivo para la versión M.2 de la unidad Intel Optane 905P NVMe. El disipador térmico pasivo garantiza temperaturas de funcionamiento más bajas, lo que prolonga la vida útil y mejora el rendimiento sostenido de la unidad.
La unidad Intel Optane 905P utiliza alrededor de 9,35 W de potencia bajo carga, lo que supone un reto para la disipación sin una solución de refrigeración dedicada como el disipador Intel Optane Heatsink, que ahora vendrá de forma predeterminada con la compra de esta unidad M.2.
El rendimiento térmico de esta solución se logra mediante almohadillas térmicas que transfieren calor al disipador de aluminio que tiene aletas para una mayor área de disipación. El diseño del disipador térmico asegura que sea fácil de instalar, de perfil bajo, fácilmente reutilizable y estéticamente no intrusivo, algo de lo que estoy personalmente de acuerdo.
El disipador Intel Optane es compatible con las unidades SSD 22110 M.2 Optane (22 mm de ancho y 110 mm de largo). El disipador Intel Optane Heatsink estaba disponible para su compra a través de la tienda virtual EK y la red de distribuidores asociados a un precio de venta al público sugerido por el fabricante de 19,90 € con IVA incluido. Sin embargo, Intel decidió incluir su propio refrigerador en los modelos M.2.
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El refrigerador consiste en una placa de metal que se instala en ambos lados de la unidad SSD. Todas las copias nuevas de la Intel Optane 905 M.2 SSD están ahora equipadas con este refrigerador sin costo adicional. Los propietarios actuales también pueden solicitar un refrigerador SSD gratuito en el sitio web de Intel.
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