Ya tenemos con nosotros el chasis Sharkoon VG6-W RGB. También hay un lugar para aquellas torres más baratas y dedicadas a usuarios menos exigentes en cuanto a prestaciones puras, pero que no desean renunciar al estilo gaming. Así es este chasis, el cual incluye tres ventiladores RGB de 120 mm con hasta 14 efectos, bahía de 5,25” para CD-ROM y ventana transparente delantera y trasera. Un chasis completo, solo para montar por poco más de 50 euros ¿Qué más pedir?
Comencemos nuestra review no sin antes entregar los agradecimientos a Sharkoon por cedernos el chasis y por su confianza en nosotros.
Pues como cualquier otro chasis disponible en el mercado, Sharkoon ha utilizado una caja de cartón grueso para guardar su chasis en el interior. Pero en este caso de color blanco, y a esto ya nos tiene acostumbrados la marca, mostrándonos un boceto detallado del Sharkoon VG6-W RGB en su frontal junto a sus características más reseñables, claramente la presencia de 3 ventiladores ARGB y un completo panel de puertos.
Y tampoco se ha descuidado el interior, con dos grandes protectores en corcho de poliestireno blanco, una bolsa para cubrir el chasis y todos los elementos necesarios para el montaje, en los que se incluyen tornillos, una chapa desmontable para un slot trasero, el altavoz para la placa, un diagrama explicativo del controlador de iluminación y finalmente un manual de usuario.
La verdad es que trae más cosas que muchos otros chasis más caros. Precisamente por el hecho de ser una torre que apuesta por proporcionar al usuario todo lo necesario para montar su hardware y olvidarse de los
Pues finalmente tenemos el Sharkoon VG6-W RGB en todo su esplendor encima de nuestra mesa de operaciones. No es difícil de manejar ya que el chasis interior está construido en acero relativamente delgadito, así como su chapa superior y los laterales, uno de ellos con chapa opaca y el otro con ventana de material acrílico.
En total, tenemos un peso de 3,7 Kg en vacío, y unas medidas también ajustaditas, aunque luego vamos a poder hacer más de lo que a priori vemos. En cualquier caso tenemos, 461 mm de profundidad o largo, 200 mm de anchura y 430 mm de altura.
Comenzaremos con el lateral izquierdo, en donde vamos a encontrar esa ventana compuesta por un marco metálico en el que se encuentra fijada una ventana acrílica transparente que deja ver la mayor parte de la zona interior. Al ser acrílica, tened cuidado con no hacerle rayones, así que limpiadla con trapos de algodón.
Para ganar en anchura, esta parte transparente está un poco más salida que el resto de la chapa mediante un marco simétrico tanto en ancho como en alto. Es una solución que busca el proporcionar más espacio interior para disipadores y hardware.
Y aquí tenemos la parte frontal de este chasis Sharkoon VG6-W RGB, la cual presenta bastantes elementos interesantes destinados al embellecimiento. Empezando con la zona central, por ser la más llamativa, tenemos un panel acrílico transparente que deja ver los ventiladores preinstalados de la zona interior. Además, se ha instalado un filtro anti polvo de grano medio, ya que en los laterales del panel acrílico hay aberturas para dejar pasar el aire. Y lo mejor esos dos ventiladores d 120 mm ARGB preinstalados.
El resto de la zona está también construido en plástico negro con un acabado rugoso para facilitar el agarre y mejorar su estética. Pero no es todo, ya que en la zona superior tenemos el botón de arranque totalmente aislado del resto del panel de puertos, así como una bahía de 5,25 pulgadas por si queremos instalar una unidad de DVD-ROM. Esto es muy interesante en estos chasis, ya que los usuarios suelen tener lectores en sus equipos orientados a reproducir contenido multimedia.
También es posible retirar esta parte frontal del resto del chasis, aunque no separarla completamente debido a que el panel de puertos está integrado de forma fija en él. Pero al menos podremos limpiarlo de forma más cómoda y completa que si fuera fijo. Por cierto, en la zona superior tampoco tenemos nada que mostrar, tan solo una chapa metálica opaca pintada en negro.
Y pasando al panel de puertos, lo cierto es que también es muy completo, contamos con los siguientes elementos:
Cuatro puertos es justamente lo que siempre pedimos en un chasis, ya que una placa de gama media no suele traer más de 6, y los periféricos cada vez necesitan más conexiones debido a la iluminación y tonterías que tienen.
Con nuestro pedazo de maceta de Ikea para que la cámara enfoque, vemos que la zona lateral derecha no es más que una gran chapa metálica opaca y con la parte central también salida hacia el exterior. El objetivo de esto, es poder guardar aquí los cables que nos sobren, dejando así un espacio de unos dos 2 cm. Luego lo agradeceremos mucho, ya veréis.
Y tenemos más buenas noticias, ya que en la parte trasera también tenemos un ventilador preinstalado de 120 mm con iluminación ARGB, haciendo el pack completo del chasis. Tenemos un total de 7 slots de expansión, aunque solamente uno de ellos cuenta con una chapa metálica desmontable.
Las otras chapas están soldadas, así que vamos a tener que retirarlas de forma manual aplicando fuerza, y ojo, antes de poner la placa base. Si tienes una tarjeta gráfica, asegúrate de quitar dos de las chapas soldadas de la parte superior. Por lo demás es una zona exactamente igual que otras torres, aunque el hueco inferior para instalar la PSU no cuenta con compartimento aislado.
En la última zona del Sharkoon VG6-W RGB, la inferior, nos encontramos con cuatro patas recubiertas en goma que subirán el chasis respecto al suelo unos 2,5 cm. Además, tenemos un filtro anti polvo de grano medio con sujeción básica para el ventilador de la PSU y una zona más adelantada con 6 boquetes ¿para qué? Sí, para poder instalar discos duros, aunque luego explicaremos más en detalle cómo hacerlo.
Ahora es turno para efectuar nuestro típico montaje con hardware gaming de gama alta, siempre, omitiendo el disco duro por motivos de falta de tiempo.
Pues lo que vemos en este chasis está todo bien a la vista, de hecho, no tenemos ningún tipo de compartimento independiente para instalación de fuente de alimentación, además, tenemos ahí bastantes cables de por medio que luego iremos quitando para conseguir un habitáculo lo más limpio posible. Lo que si tenemos es una zona que soporta fuentes de hasta 265 mm, es lo bueno de que todo esté libre.
Lo que si tenemos es un hueco lo suficientemente grande como para poder trabajar en la zona trasera de la placa base sin desmontarla. También tenemos distintos agujeros en los laterales y zona inferior para pasar cables hacia el otro lado. Ojo, porque arriba no tenemos huecos para los cables EPS, así que tendrán que quedarse visibles.
Vemos que además tenemos la respectiva bahía con fijación rápida para el lector de CD-ROM, y justo debajo una bahía para discos duros. Los ventiladores por supuesto están instalados en esta zona interior, ya que no hay espacio físico para hacerlo entre el chasis y la carcasa frontal. El espacio disponible para tarjetas gráficas asciende hasta los 375 mm y el de disipadores de CPU hasta 165 mm, así que prácticamente cabrán todos los modelos disponibles.
Te puede parecer que solo tenemos la bahía que hay debajo de la zona para el lector de CDs, pero lo cierto es que podremos instalar hasta 5 discos duros a la vez, combinando 2 de 3,5” junto a 3 de 2,5”, o directamente 5 de 2,5”.
Para empezar, en la zona lateral que queda libre entre placa base y frontal tenemos un espacio destinado a tres unidades de 2,5 pulgadas mediante sus cuatro tornillos. De igual forma, si aprovechamos la bahía de 3,5 pulgadas, podremos instalar un disco duro de 3,5” en su interior y otro disco encima (o debajo), o si lo preferimos solo uno de 2,5 pulgadas. Pero es que, si nos vamos abajo, sí, en esta zona donde antes vimos unos cuantos boquetes, podremos instalar otra unidad de 3,5 pulgadas.
Además, Sharkoon VG6-W RGB nos brinda un buen detalle de personalización, ya que esta bahía doble la podremos colocar también en la zona inferior. Es algo bastante interesante por si queremos tener los cables más escondidos, ya que en la zona superior no podríamos.
En el aspecto que concierne a la refrigeración de Sharkoon VG6-W RGB, lo cierto es que no tenemos demasiadas opciones además de lo que vemos de primeras.
Pues como viene siendo habitual, veamos cómo y cuantos ventiladores podremos colocar:
Pues ya estaría, en este caso es un chasis sumamente escueto en cuanto a soporte de ventiladores. Lo bueno es que por el precio que tiene, tener tres ventiladores de 120 mm ARGB (RGB direccionable) preinstalados está muy bien. Sí echamos en falta al menos soporte para ventiladores de 140 mm en la zona delantera, si total, tan solo es troquelar la chapa en las medidas necesarias.
¿Tendremos soporta para refrigeración líquida? Algo hay:
El fabricante no especifica nada al respecto, pero según las medidas que hemos tomado de los troqueles que hay en el panel frontal, efectivamente podremos instalar un AIO Liquida de hasta 240 mm. En la zona trasera, no tenemos espacio físico para instalar uno de 120 mm, ya que el ventilador entra justo en el hueco.
Podemos aún detallar algunos aspectos interesantes a tener en cuenta de estos ventiladores. Presentan, en primer lugar, una conexión tradicional MOLEX para su funcionamiento, así que, por una vez en la vida, daremos uso a estos conectores disponibles aún en prácticamente todas las fuentes de alimentación. El conector que tiene es tanto macho como hembra, así que podremos conectar los tres ventiladores en una misma columna.
Y aunque no se vea demasiado bien, también tiene cada uno de ellos una cabecera de tres pines que permite conectarlos a la placa base, aunque para mejorar el aspecto, pues recomendamos el conector MOLEX.
Y estudiando un poco la capacidad de refrigeración de Sharkoon VG6-W RGB, no tenemos control de RPM, aunque son ventiladores bastante silenciosos como hemos podido comprobar. El flujo de aire que entra es lo suficientemente grande como para refrigerar con buena eficiencia los componentes. El ventilador trasero se encargará de sacar todo el aire caliente al exterior, así que Sharkoon nos proporciona una caja con todo incluido y que funciona bien.
En el apartado de la iluminación no tendremos que complicarnos demasiado, ya que en la zona trasera se ubica un microcontrolador provisto de cuatro conectores RGB de cuatro pines con interfaz RGB direccionable 5V-D-G en los que ya tenemos los tres ventiladores conectados.
En el panel de puertos, tenemos el correspondiente botoncito para cambiar a nuestro gusto la animación de estos tres ventiladores. En total, tendremos 14 modos de iluminación, combinando un modo RGB típico, combinaciones de dos y tres colores y colores fijos. A esto se le denomina Addressable RGB, por tener la capacidad de modificar cada ELD del ventilador.
Pero si lo preferimos, podremos conectar estos ventiladores a una placa base que implemente una tecnología de iluminación propia, ya sabemos, MSI Mystic Light, Asus AURA Sync, Gibabyte RGB Fusion y Asrock Polychrome RGB.
Sin más que explicar en cuanto a prestaciones, vamos a ver más detalladamente el montaje que hemos efectuado en Sharkoon VG6-W RGB.
Si nos fijamos en la zona trasera, no encontramos nada que sirva para efectuar el enrutamiento de cables, de hecho, tan solo tenemos unas cuantas aberturas de fijación para utilizar presillas y fijar aquí los cables. Tampoco esperamos más en un chasis básico, así que tendremos que ingeniárnoslas para intentar dejar bien puestos todos los cables que vayamos a tirar hacia esta zona.
Gracias a la zona sobresalida del panel lateral, hemos conseguido espacio más o menos suficiente para que los cables tanto del panel I/O como de la PSU están bajo control. Pero si tenemos mucho hardware, decimos, varios discos duros etc., la cosa se va a complicar bastante y tendremos que hacer uso del espacio principal.
Pues aquí tenemos el resultado de cómo han quedado los cables. Hemos conseguido esconder la mayoría de ellos atrás, excepto los cables EPS que van hacia el VRM de la placa. En este aspecto, pensamos que Sharkoon podría haber destinado una mínima parte del chasis a generar un hueco para que entraran estos cables EPS por detrás. ¿Qué ocurre? Pues que, si nos fijamos, la PSU cabe justa con una placa ATX, así que hubiera sido necesario aumentar la altura del chasis en 2 cm más.
En la parte de atrás, tenemos una chapa que debemos retirar para poder meter e instalar la tarjeta gráfica. Una vez colocada, tendremos que ponerla nuevamente para así fijar la tarjeta en el chasis. No es necesario, pero recomendable para mejorar el resultado final.
Pues ya veis, para ser un chasis básico en cuanto a opciones de enrutamiento y personalización de componentes y con un espacio relativamente limitado, el resultado final está bastante bien. Pocos cables a la vista gracias al hueco trasero y una iluminación que nos da un aspecto gaming y propio de un chasis de mayor coste, sobre todo con ese elemento frontal transparente.
Llegamos al final de esta review, y ya podemos tener una buena de guía de lo que es capaz de darnos este chasis básico Sharkoon VG6-W RGB.
Y lo cierto es que al menos en estética, la marca ha conseguido un resultado realmente bueno y orientado al gaming. Lateral transparente y un trabajado frontal también con elementos acrílicos trasparentes que deja ver la iluminación ARGB de sus ventiladores. Algo que sí falta por supuesto, es mejor calidad en el chasis de acero, panel de vidrio o un compartimento para la PSU.
Hablando de ventiladores, es una de sus ventajas, por un precio ajustado tenemos tres ventiladores preinstalados de 120 mm y además un microcontrolador para la iluminación, y compatibilidad con placas, gran trabajo de Sharkoon aquí. En cuanto a su capacidad, no es una torre de gran tamaño, y esta bastante limitado. Hubiera sido interesante la compatibilidad con ventiladores de 140 mm.
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Algo que sí vemos muy acertado es implementar un panel I/O con cuatro puertos USB, parecerá básico, pero en los chasis de gama media éstos brillan por su ausencia, y se hacen muy necesarios. De igual forma, tener una bahía de 5,25” también es un gran reclamo para aquellos que aún usan discos compactos.
La capacidad de hardware ciertamente es muy buena, compatible con los principales tipos de placa, grandes PSU y Tarjetas gráficas y prácticamente cualquier disipador con esos 165 mm. Pero al ser un chasis de 200 mm de ancho, perdemos mucho espacio atrás para la gestión de cableado y esto se nota mucho y las dificultados son obvias.
Para finalizar, este Sharkoon VG6-W RGB lo podremos encontrar en el mercado a día de hoy, por un precio de 56,90 euros en la versión RGB, que es la nuestra. También tenemos tres configuraciones disponibles con iluminación fija en azul, verde y roja por 47,90 euros. ¿Qué te parece este chasis básico para el día a día?
| VENTAJAS | INCONVENIENTES |
| + DISEÑO GAMING | – NO SOPORTA VENTILADORES DE 150 MM |
| + 3 VENTILADORES ARGB + CONTROLADOR | – GESTIÓN DE CABLEADO POBRE CON POCO HUECO |
| + BUENA CAPACIDAD PARA HARDWARE Y ALMACENAMIENTO | – SIN COMPARTIMENTO PARA PSU |
| + ELEMENTOS TRASPARENTES EN FRONTAL Y LATERAL | – ACRÍLICO EN LUGAR DE VIDRIO |
| + Bahía de 5,25” | |
| + PRECIO |
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