Si está leyendo esto, es porque seguramente estés en tu PC, o al menos tengas uno en casa, ¿Dónde conectas la alimentación de tu PC? En este artículo hablaremos del SAI, qué es y para qué sirveen nuestro ordenador y además veremos qué tipos hay y características, para saber a qué nos enfrentamos en el mercado.
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Sin duda la mayoría de nosotros tenemos equipos electrónicos en nuestro hogar, todos ellas dependen de la energía eléctrica para funcionar. Las fuentes de alimentación son el puente entre nuestra casa y el PC y es muy importante que esta energía sea constante y estable para no dañar los frágiles componentes internos. En ningún caso quisiéramos perder nuestros datos o comprar componentes nuevos, y si lo elevamos al mundo empresarial, este pensamiento será aún más importante.
Es aquí donde aparecen los SAI, unos equipos que tradicionalmente han estado presentes en el mundo empresarial y los servidores, pero cada vez es más común verlos en casa y poder adquirirlos a precios relativamente económicos para dar un extra de protección a nuestros aparatos electrónicos. Veamos qué es un SAI.
Las siglas SAI vienen del acrónimo “Sistema de Alimentación Ininterrumpida”, y es común encontrarlo también pos sus siglas en inglés UPS (uninterrumpible power supply).
La función de un SAI es la de proporcionar alimentación a los dispositivos que estén conectados en él de forma constante, incluso cuando se corta el suministro eléctrico, estos dispositivos serán capaz de proporcionar energía durante un tiempo para que nos dé tiempo a almacenar nuestros datos y apagar el ordenador de forma correcta. Para ello este equipo incluye un sistema de baterías de corta duración que se activa cuando detecta que no hay suministro eléctrico en la toma principal.
Pero no solamente sirve para esto, también en un equipo que se encarga de que la electricidad que llega a nuestro ordenador lo haga de una forma constante y sin picos y bajos de intensidad, para así preservar la fuente de alimentación y otros componentes como la placa base. Porque el suministro eléctrico no siempre es constante y varía bastante en instalaciones deficientes y situaciones de alto consumo, nosotros nunca notamos nada porque la propia fuente de alimentación cuenta con un sistema que absorbe estas subidas y bajadas si es de suficiente calidad.
Entonces, los fallos de los que nos protege un SAI pueden ser los siguientes:
Debemos tener presente que nuestra propia casa dispone de elementos de protección como son los interruptores magnetotérmicos, que protegen de sobrecargas y cortocircuitos, y los interruptores diferenciales, que nos protegen de derivaciones. Pero estos proporcionan una protección algo más básica que un SAI y además no tenemos certeza de que están en correcto estado si es que lleven instalados un montón de años.
En función de su utilidad y de las características de protección que nos brinde, podremos encontrar varios tipos de SAI en el mercado. Cada modelo nos va a proporcionar unas características determinadas y estará orientado a un uso.
Los SAI también deben contar con un sistema de conversión entre corriente alterna y corriente continua, ya que las baterías siempre irán alimentadas en continua, y la fuente de alimentación de nuestro PC se alimentará en corriente alterna.
Los SAI offline son el modelo más simple que podemos encontrar en el mercado, y se llama así porque no protege activamente el PC de sobretensiones prolongadas ni filtra la señal de corriente hasta llegar a nuestro PC. En este caso es un equipo que solamente nos protege de cortes de corriente, mediante una batería de corta duración, y de picos de tensión y sobretensiones puntuales a lo sumo.
El sistema de construcción es el más simple de todos, que se basa en una línea que irá desde la toma de corriente hasta el PC de forma directa o casi directa, y un cargador para la batería interna. Cuando la corriente principal se corte, un inversor se encargará de convertir la corriente continua de las baterías en corriente alterna para suministrársela al equipo.
Pasamos al segundo tipo de SAI, el cual es sin duda el que más comúnmente nos vamos a encontrar en el mercado con una buena relación entre su coste y las ventajas que nos ofrece. Con él, además de corregir picos de tensión y soporte cuando hay fallos de alimentación, también nos protege de infratensiones o sobretensiones prolongadas y ruidos en la señal eléctrica.
Para hacer esto el equipo cuenta con un transformador dinámico que hace las veces de filtro para estabilizar la corriente que pasa a través del SAI hacia nuestro PC. De esta forma la señal eléctrica se corrige para eliminar esos picos que tanto daño pueden hacer. Por lo demás el sistema de almacenaje de corriente es el mismo que en el caso anterior, con un sistema de baterías y un inversor para convertir esa corriente continua en alterna.
Llegamos hasta el último tipo de SAI, el cual es el más completo de todos y que proporciona mayor protección. Con ellos, además de las acciones anteriores, también protegerá de distorsiones de onda alterna, variaciones de frecuencia y de microcortes de corriente.
Para ello estos SAI utilizan un sistema que de conversión completa de la corriente de entrada en una señal totalmente nueva. La electricidad primero es transformada en corriente continua para que sea almacenada y pasa a través de las baterías, luego es nuevamente transformada en corriente alterna para que sea suministrada al PC conectado. De esta forma el SAI genera una nueva señal que es totalmente independiente de la que haya entrado.
Estos equipos se utilizan para procesos críticos como armarios de servidores y equipos que necesitan máxima estabilidad y funcionamiento 24/7.
La potencia de un SAI es la medida más importante para comprarnos uno de estos dispositivos, ya que es la que va a determinar la cantidad de energía que va a ser suministrada a nuestro ordenador, y en ningún caso querríamos quedarnos cortos ¿no?
La potencia en un SAI puede venir medida en Voltiamperios (VA) por ser un equipo que trabaja con corriente alterna y cuenta con elementos inductivos que generan energía reactiva, o directamente en Vatios (W). Veamos una pequeña explicación para entender qué son las VA y que lo diferencia de los W.
VA, VAR y W
En este sentido, deberíamos conocer qué es la energía activa, reactiva, aparente y el factor de potencia.
Pues bien, en el caso de los SAI siempre hay dos valores a considerar, los W y los VA, y debemos conocer cómo calcular los W a través de sus VA para asegurarnos que este equipo de la potencia activa suficiente para alimentar nuestro PC.
Calcular factor de potencia
Las tres medidas de potencia comentadas, pueden distribuirse matemáticamente mediante un triángulo rectángulo, esto se debe al carácter sinusoidal que tiene la corriente alterna. Debido la potencia reactiva la tensión puede adelantarse o atrasarse respecto de la intensidad, entonces, todo es cuestión de ángulos y por eso, estos cálculos se basan en el teorema de Pitágoras.
En la imagen anterior vemos donde se colocarían las distintas potencias. Imaginemos que tenemos un SAI de 1200VA y 720W, entonces el cos(φ) será, según Pitágoras:
Cos(φ)=720/1200= 0,6
No es una mala medida, ya que los SAI de gama media-alta suelen tener un factor de potencia entre 0,6 y 0,7. Tampoco debemos preocuparnos porque un SAI tenga un cos(φ) que no cumpla con el REBT de 0,9, ésta energía será compensada por otros apartados eléctricos y por los propicios condensadores del SAI. En grandes empresas en donde el cos(φ) no cumple se instalan baterías de condensadores.
Si por ejemplo nos dieran el cos(φ) y la potencia reactiva, calcularíamos la potencia activa del SAI de la siguiente forma:
Potencia Activa=Cos(φ) x 1200 = 0,6 x 1200 = 720 W
Tampoco nos vamos a extender aquí en teoría de circuitos porque no es el objetivo. Por lo que, en resumen, debemos fijarnos en estos VA, y factor de potencia, o en su caso, en los Vatios de salida del equipo, y que sea iguales o superiores al consumo del aparato o aparatos que vayamos a conectar a él.
Otro elemento que necesitamos conocer es el número de salidas que va a tener nuestro SAI. Por supuesto, dependerá de la cantidad de equipos que queramos conectar a él, y de la potencia de cada uno de ellos. También debemos tener en cuenta que no todos los SAIs tienen alimentación de las baterías en todas las salidas.
En este aspecto, será interesante ver si el SAI tiene otro tipo de conectores, por ejemplo, puertos USB para cargar móviles o USB Type-C para carca de portátiles compatibles. Algunos también tienen pantallas LCD para monitorizar el estado de carga de las baterías y otros parámetros como el consumo.
Otro parámetro esencial será la cantidad de tiempo que podrán suministrar energía las baterías del SAI. Entre más duración tengan, mayor será el coste, como es normal.
Además, debemos fijarnos en qué potencia podrán suministrar estas baterías y durante cuánto tiempo, así podremos más o menos saber durante cuánto tiempo podremos trabajar sin suministro general de corriente.
Los SAI son unos equipos cada vez más utilizados por los usuarios de equipos domésticos, especialmente si trabajamos en casa, si nuestro equipo es especialmente caro o simplemente si sabemos que el suministro eléctrico que tenemos es bastante deficiente. En un momento dado un SAI puede salvar literalmente nuestro ordenador y ahorrarnos un montón de dinero.
Comenzaron siendo utilizados por empresas informáticas y profesionales, pero el descenso de precios, la reducción de espacio y el aumento de prestaciones, lo convierten en un periférico más a tener en cuenta para la compra de nuestro equipo. ¿Utilizas tú un SAI, o has visto alguno?
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