Ubisoft la liberado la nueva actualización 1.03 para Assassin’s Creed Origins con la intención de mejorar el rendimiento de un videojuego que ha mostrado graves problemas incluso en los equipos más potentes. Esto es una excelente noticia en principio, lo que pasa es que los usuarios de tarjetas gráficas de AMD se han quedado en el olvido y el juego rinde incluso peor que antes.
Ya os adelantábamos que Ubisoft había lanzado un nuevo parche para Assassin’s Creed Origins, ahora sabemos que esta nueva actualización le sienta de maravilla a las tarjetas gráficas de Nvidia con una mejora del rendimiento que alcanza el 10-15%, lo que no está nada mal para un juego que ha salido al mercado hace pocos días.
La mala noticia es que los usuarios de tarjetas de AMD se han quedado en el olvido y el juego no solo no mejora sino que incluso rinde peor que antes. Los datos de rendimiento iniciales del juego con la Radeon RX Vega 64 eran los siguientes:
Después de la nueva actualización 1.03 el rendimiento es casi idéntico pero ha disminuido en 1-2 FPS:
Claro que estamos hablando de una diferencia de rendimiento tan pequeña que no es considerable y se puede deber a que las condiciones nunca son exactamente las mismas en dos partidas diferentes. Lo importante es que se han mencionado casos de cierres forzosos del juego después de estar funcionando durante unos 15 minutos por lo que parece claro que esta nueva actualización de Assassin’s Creed Origins no está libre de problemas y es de esperar que Ubisoft lance un nuevo parche muy pronto.
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