La espera ha llegado a su fin y ya conocemos oficialmente a los nuevos smartphones de Motorola, el Moto G y el Moto X de tercera generación que llegan con alguna que otra sorpresa.
Empezamos con el nuevo Motorola Moto G de tercera generación que llega en dos variantes como se ha venido rumoreando. Una primera versión está dotada de 1 GB de memoria RAM y un almacenamiento interno de 8 GB ampliable mediante tarjeta microSD. La segunda versión llega con 2 GB de RAM y un almacenamiento de 16 GB también ampliable. En ambos casos se admite una tarjeta de memoria con un máximo de 32 GB de capacidad, algo que puede resultar escaso más cuando rivales como Microsoft dotan a sus smartphones más económicos con compatibilidad con tarjetas de hasta 128 GB, algo que ya vimos en la review del Lumia 435.
Aquí se acaban las diferencias ya que el resto de características son idénticas en ambas versiones. Encontramos una pantalla IPS de 5 pulgadas con resolución 1280 x 720 píxeles y protegida por Gorilla Glass 3 a la que da vida un procesador Qualcomm Snapdragon 410 con cuatro núcleos Cortex A53 a 1,4 GHz y la GPU Adreno 306. Ciertamente en este aspecto el Moto G apenas ha avanzado desde su primera versión y empieza a quedarse atrás aunque gracias a la excelente optimización de su software Android 5.1 Lollipop debería funcionar muy fluido.
En cuanto a la óptica encontramos una cámara principal de 13 megapíxeles con flash LED de doble tonalidad y una cámara frontal de 5 megapíxeles que cumplirá con las exigencias de los selfieadictos. No falta conectividad 4G LTE además de las imprescindibles WiFi, Bluetooth y GPS.
Por último encontramos un doble altavoz frontal, una batería de 2.470 mAh y resistencia al agua y polvo pudiendo ser sumergido 30 minutos hasta 1 metro de profundidad.
Sus precios serán aproximadamente de 180 y 200 euros.
Llega el turno de la gama alta de Motorola con el Moto X de tercera generación que también llega en dos versiones diferentes con más diferencias que las encontradas en el Moto G.
El Motorola Moto X Play llega con una pantalla IPS de 5,5 pulgadas con resolución 1920 x 1080 píxeles protegida por Gorilla Glass 3 a la que da vida un interesante procesador Qualcomm Snapdragon 615 de ocho núcleos Cortex A53 a un máximo de 1,7 GHz y la GPU Adreno 405. Acompañando al procesador encontramos 2 GB de RAM y un almacenamiento interno a elegir entre 16 y 32 GB ampliables en hasta unos interesantes 128 GB, muy buen trabajo en este aspecto. En cuanto al sistema operativo llega con Android 5.1 Lollipop como no puede ser de otro modo.
Respecto a la óptica encontramos una cámara trasera de 21 megapíxeles también con flash de doble tonalidad y una cámara frontal de 5 megapíxeles. El resto de características incluyen una batería de 3.630 mAh con función de carga rápida Turbo Charging, conectividad Dual SIM, 4G LTE, WiFi, Bluetooth y GPS, la misma resistencia al polvo y agua que el Moto G
La opción más potente de Motorola que mejora al modelo anterior con la presencia de una pantalla IPS de 5,7 pulgadas con resolución QHD de 2560 x 1440 píxeles para una calidad de imagen a la altura de los mejores del mercado. En su interior esconde un procesador Qualcomm Snapdragon 808 formado por dos núcleos Cortex A57 y cuatro Cortex A53 a una frecuencia máxima de 2 GHz junto a la GPU Adreno 418. Apoyando al procesador encontramos 3 GB de RAM y un almacenamiento interno a elegir entre 16 y 32 GB ampliables de nuevo en hasta 128 GB.
Seguimos encontrando la misma cámara trasera de 21 megapíxeles y la frontal de 5 megapíxeles del Motorola Moto X Play y las mismas opciones de conectividad. En cuanto al aspecto negativo tenemos una batería más escasa de 3.000 mAh con la misma tecnología de carga rápida y pierde la resistencia a ser sumergido en el agua, tan solo es resistente a salpicaduras.
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